Una valla cuyo propósito era mantener alejados a los manifestantes de las cercanías de la Casa Blanca se ha transformado en un punto de exhibición de los mensajes de protesta por la muerte de George Floyd, asfixiado por un policía en Minneapolis.
La cerca comenzó a ser levantada apenas unos días después del comienzo de las masivas protestas que se han registrado en varias ciudades del país como parte de un movimiento que reclama contra la excesiva violencia policial contra personas negras.
Con entre 8 y 10 pies de alto, las vallas pretendían aumentar la seguridad del presidente, Donald Trump, en el interior de la Casa Blanca. Durante una de las noches de protesta en la plaza Lafayette, en Washington DC, el mandatario fue llevado a un búnker subterráneo, algo que fue confirmado por el fiscal general, William Barr, después de que Trump lo negara.
La reja ha sido transformada por los manifestantes en el marco perfecto para lucir sus carteles con mensajes de apoyo al movimiento anti-racista.
“No puedo respirar”, “Sin justicia no hay paz”, “El color de mi piel no es un crimen” y “Retiren los fondos a la policía” son algunas de las frases con las que los manifestantes convirtieron una reja para ahuyentarlos en un memorial.
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“Las vidas negras importan”, otro de los mensajes que se repite a lo largo de la valla, fue pintado también con letras gigantes en la calle 16 que da directamente a la plaza y la Casa Blanca.
No está claro por qué la Casa Blanca decidió acordonar su perímetro con estas vallas, ya que las protestas realizadas en el lugar han sido mayoritariamente pacíficas, aunque la policía reprimió con gases lacrimógenos y balas de goma a un grupo de manifestantes en la plaza Lafayette para permitirle a Trump caminar hasta una iglesia cercana y tomarse una foto con una Biblia.
"La Casa Blanca no realiza comentarios sobre sus protocolos de seguridad y sus decisiones”, dijo el vocero Judd Deere.
El cierre lo realizó el Servicio de Parques Nacionales bajo la dirección del Servicio Secreto, según informó el diario The Washington Post.
“Recuerden que esta es la casa de la gente”, ha dicho la alcaldesa de DC Muriel E. Bowser. “Es triste que la casa y sus habitantes estén amurallados”, opinó la líder demócrata Nancy Pelosi. El senador Charles E. Schumer envió una carta a Trump pidiendo la reapertura de la plaza Lafayette.
Una vocera del Servicio de Parques Nacionales dijo que las restricciones de acceso comenzarán a levantarse este miércoles.
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