IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

¿Qué sucede si Trump y Pence se contagian de coronavirus y no pueden gobernar?

La Constitución prevé qué hacer en caso de que el presidente quede incapacitado. Históricamente, ha ocurrido en tres ocasiones. En otra, tras un ataque terrorista, no fue necesario.
/ Source: Telemundo

El presidente, Donald Trump, anunció el 1 de octubre que dio positivo en una prueba de COVID-19, al igual que la primera dama, Melania Trump. 

¿Qué sucedería si la enfermedad provoca que presidente deba ser hospitalizado e intubado?

Cuando un paciente necesita un ventilador, primero se le debe insertar un tubo de respiración y "eso requiere que esté sedado, efectivamente incapacitado, de lo contrario no es posible intubarlo", explica el doctor John Torres, corresponsal médico de la cadena NBC News.

En ese caso ¿quién tomaría las riendas del país? Y en medio de una pandemia como la actual, en la que todos somos vulnerables, ¿qué pasa si también Pence ha de ser hospitalizado al mismo tiempo?

"La situación es complicada”, explica a Noticias Telemundo Steffen Schmidt, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Estatal de Iowa.

[Nuestra cobertura completa sobre la pandemia del nuevo coronavirus]

En el momento en que un presidente no puede cumplir sus funciones es cuando entra en juego la Enmienda 25 de la Constitución.

Esa disposición contempla tres posibles escenarios:

-El presidente es el único que queda incapacitado por un breve periodo de tiempo y él mismo lo notifica al Congreso: La sección 3 de la enmienda dice que el mandatario puede autodeclararse "incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su cargo" y, una vez lo notifique formalmente al Congreso, el vicepresidente toma su puesto de forma interina hasta que comunique al Congreso que nuevamente está en condiciones de ocuparlo.

Desde que se adoptó la enmienda en 1967, se ha activado en tres ocasiones, y en cada caso siempre se informó previamente al Congreso porque el presidente sabía de antemano que el procedimiento requería anestesia.

Ronald Reagan la invocó cuando fue operado de cáncer de colon, y George W. Bush en dos ocasiones para someterse a sendas colonoscopias.

[Así ha sido la respuesta de Trump a la pandemia de coronavirus, con una secuencia de errores]

-Si el mandatario queda incapacitado repentinamente y no puede avisar al Congreso: El vicepresidente se convertiría en el presidente en funciones una vez que él mismo y la mayoría de los miembros del Gobierno notifiquen al Congreso que el mandatario no puede cumplir con sus deberes, según las directrices de la Sección 4 de esa misma enmienda.

Esta última disposición nunca se ha utilizado, ni si quiera después de que Reagan fuera sufriera un atentado en 1981. Los funcionarios de la Casa Blanca discutieron cómo invocar la enmienda 25 en aquel momento, pero el vicepresidente, George H.W. Bush, estaba de viaje. A su regreso, el estado del presidente se había estabilizado y sus médicos anticiparon una recuperación completa.

[¿Perdió ingresos por el coronavirus? Llamar a las tarjetas y bancos es esencial para reducir sus deudas y facturas]

-El presidente y el vicepresidente no pueden cumplir con sus obligaciones al mismo tiempo de forma inesperada: Se recurriría a la Ley de Sucesión Presidencial, a partir del artículo II de la Constitución, que permite al Congreso a aprobar estatutos de línea de sucesión.

Tras el presidente y el vicepresidente, la siguiente en la línea de sucesión es la presidenta de la Cámara de Representantes, un cargo que ahora ostenta la demócrata Nancy Pelosi; por detrás está el presidente pro tempore del Senado, y después miembros del Gabinete (uno y otros, republicanos ahora).

Aunque esa posibilidad es remota, si Pelosi, cuyas disputas con Trump han sido notorias, fuera declarada presidenta interina, podrían producirse "protestas y resistencia por parte de los grupos que apoyan al presidente y a los republicanos", según Steffen W. Schmidt, coautor del libro de texto universitario American Government and Politics Today.

"Reventaría una profunda crisis constitucional y política con erupciones de violencia”, pronostica.

Pero esa ley, que fue modificada por última vez en 1947, no ha tenido que ser aplicada nunca, lo que crea más "incertidumbre", añade Schmidt: "No tenemos precedentes sobre qué ocurririría si el poder pasara a Pelosi".

Pese al tornado sociopolítico que podría provocar la eventualidad de que Trump y Pence no pudieran gobernar, la Casa Blanca no parece estar alarmada. Al respecto, una portavoz dijo que el gobierno federal cuenta con planes para la continuidad de las operaciones, aunque no los especificó.

Si bien Trump emitió una orden la semana pasada para que todos los empleados de la Casa Blanca usen mascarilla, él mismo sigue sin hacerlo pese a que ha recuperado su agenda de viajes y mítines en público. 

Con información de NBC News y Lawfare