WASHINGTON.— El presidente, Donald Trump, ha defendido esta semana de nuevo su gestión para atajar la pandemia de coronavirus, que suma por lo menos 613,886 contagios y 26,047 muertes en Estados Unidos. Aunque ha acusado a la prensa de propagar "noticia falsas", su gobierno tiene seis promesas incumplidas.
Trump plantea relanzar la economía nacional a principios de mayo, y asegura que tiene “total autoridad” para ello (aunque la Constitución dice lo contrario). Este martes anunciará un concejo de expertos para decidir cómo y cuándo hacerlo.
Sin embargo, la autoridad sobre emergencias de salud pública y desastres naturales recae en los estados, en coordinación con el Gobierno federal. Nueva York ya ha avanzado que desafiará las órdenes presidenciales si implican un riesgo para la salud pública.
Trump prohibió los viajes desde China el 31 de enero, pero no declaró la emergencia nacional hasta el 13 de marzo. Este lunes defendió en un tenso intercambio con periodistas que no sólo ha hecho "una gran labor" sino que ha ayudado a salvar “decenas de miles de vidas, quizá centenares de miles de vidas”.
Sin embargo, un mes después de declarar la emergencia sanitaria nacional, aún no ha cumplido la mayor parte de sus promesas para mitigar la crisis.
En declaraciones a Noticias Telemundo, el presidente del Comité Nacional Demócrata, Tom Pérez, afirmó hoy que “desde el primer día, Donald Trump ignoró las advertencias, minimizó la gravedad de la crisis, y no logró preparar o aumentar las pruebas, lo que permitió que se propagara el coronavirus con rapidez y sin ser detectado”.
“Ahora estamos viviendo con las consecuencias. El pueblo estadounidense está harto con su récord de promesas rotas y su incapacidad para cumplir; tengan por seguro que los votantes le exigirán cuentas por su impotencia política en noviembre”, advirtió Pérez.
Pero, Judd Deere, un portavoz de la Casa Blanca aseguró a la prensa que Trump ha tomado “acciones audaces y decisivas” para responder a la crisis, y ahora colabora estrechamente con el sector privado “para responder a los retos económicos y de salud que presenta el COVID-19”.
El Gobierno federal ha suspendido por ejemplo los intereses en préstamos estudiantiles bajo programas federales, pero no ha desembolsado fondos para que laboratorios nacionales, como LabCorp y Quest, construyan más instalaciones de pruebas.
Tampoco puede, como ha prometido, suspender los requisitos de licencias para que los médicos puedan desplegarse a las zonas remotas, porque eso corresponde a los gobiernos estatales.
Éstas son otras promesas incumplidas, según una investigación de la radio pública (NPR) y otras fuentes:
➡️Pruebas de coronavirus en casa.— Trump dijo que inició contactos con varias corporaciones privadas para facilitar las pruebas de diagnóstico en los hogares, especialmente en zonas remotas del país.
Hasta el 9 de abril, la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA, en inglés) había emitido 37 aprobaciones de pruebas para la detección del virus y una aprobación para una prueba de anticuerpos. Pero ninguna de ellas se puede realizar en casa.
➡️Pruebas en unidades móviles en almacenes.— Trump dijo que forjaría alianzas con el sector privado para ofrecer las pruebas en sitios donde las personas no necesiten siquiera bajarse de su auto.
Por ahora, sólo hay alrededor de 10 sitios drive-thru, como se conocen en inglés: dos en centros comerciales Walmart en Chicago (Illinois) y Bentonville (Arkansas), dos de tiendas Walgreens en Chicago, cuatro en tiendas CVS y por lo menos dos en el Sur de Florida (uno en Pembroke Pines).
Target ha asegurado que apoya los esfuerzos de las autoridades locales, estatales y federales, y pondrá a su disposición sus estacionamientos para las pruebas, pero no ha dicho cuándo.
➡️Google no tiene página web para pruebas.— Trump dijo que Google designó a un millar de ingenieros para elaborar una página web que determine quién necesita una prueba para detectar el COVID-19, y dónde conseguirla en cada zona geográfica.
No existe tal página, aunque un programa piloto de Verily, una empresa afiliada a Google, ha lanzado seis sitios de prueba en cinco condados en California. Lo hizo en coordinación con el gobierno estatal, no con la Casa Blanca.
➡️Más equipos de protección temporal.— Aunque la Administración intenta agilizar la compra y distribución de mascarillas, mascarillas N95, batas y demás equipos de protección temporal, conocidos por su sigla en inglés como PPEs, éstos no llegan a los hospitales con suficiente rapidez.
El llamado Suministro Estratégico Nacional de estos productos agotó sus existencias casi en su totalidad hace unas semanas, y muchos profesionales de salud han tenido que depender de donaciones privadas o mascarillas caseras.
➡️Distribución de respiradores.— Trump ha culpado al expresidente Barack Obama de dejarle vacía la reserva de suministros médicos y respiradores mecánicos, imprescindibles para los casos más graves de COVID-19.
Su queja, sin embargo, omite que él ha tenido tres años para abastecer al país de estos suministros médicos.
Trump prometió el mes pasado aliarse con empresas para la producción masiva de respiradores artificiales, pero el sector privado aparentemente carecía de capacidad para esa misión.
El secretario de Salud, Alex Azar, anunció anoche la firma de cinco contratos para la producción de respiradores bajo el Acta de Producción de Defensa, con las empresas General Electric, Hill-Rom, Medtronic, ResMed y Vyaire.
Esos contratos se suman a otros con las empresas Hamilton y Zoll.
El Departamento de Salud dice tener asegurado así el suministro de 6,190 respiradores para el 8 de mayo, y de 29,510 respiradores para el 1 de junio. Para finales de este año, los siete contratos autorizados este mes proveerán un total de 137,431 respiradores, según el Departamento de Salud.
➡️Ampliación de la Reserva Estratégica de Petróleo.— Trump prometió la compra de “grandes cantidades” de petróleo “a buen precio” para la Reserva Estratégica, pero fuentes legislativas confirmaron a Noticias Telemundo que su Gobierno no ha hecho aún una solicitud formal de fondos al Congreso.
Fuentes: Casa Blanca, Congreso, Comité Nacional Demócrata, y la cadena de radio pública NPR.
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