Por María Peña
WASHINGTON DC.— “Al mal tiempo, buena cara”, dice el refranero español, y estos días, angustiados por la epidemia de coronavirus y sus consecuencias para la salud y la economía, y bajo orden de encierro domiciliario en la mitad del país, millones de personas comparten en redes sociales imágenes y videos humorísticos como receta clave, según expertos, para afrontar esta crisis.
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Redes sociales como Twitter, Facebook o Instagram se han poblado así de memes, canciones, caricaturas y otras imágenes divertidas que tratan, entre otros aspectos, la cuarentena en casa, el distanciamiento social, la escasez de productos básicos en supermercados, e incluso el acaparamiento de papel higiénico.
Los efectos emocionales de la pandemia no son muy distintos a los de una guerra o un ataque terrorista: millones de personas pueden sentir ansiedad, estrés e incertidumbre, y, encerrados en casa, la asistencia familia o profesional se complica.
Aunque no hay cifras exactas, las consultas a los terapeutas han aumentado conforme avanza la pandemia en EE.UU., sólo que, para evitar un contacto directo, en vez del diván, los estadounidenses recurren al teléfono, Skype, FaceTime, Google Hangouts, y demás herramientas virtuales disponibles, para sus citas de “teleterapia”.
En la ciudad de Nueva York, una de las más golpeadas por la pandemia, la empresa tecnológica Real ofrece sesiones de terapia psicológica gratuita y otros programas virtuales de asistencia.
Frente al caos que ha generado el coronavirus en Estados Unidos, el sentido del humor se ha convertido en una herramienta obligatoria para sobrellevar la pandemia, según dos expertas consultadas hoy por Noticias Telemundo.
“No podemos perder el sentido del humor, aunque haya mucho estrés, ansiedad e incertidumbre. En estos momentos de encierro, también hay mucha incertidumbre con respecto a los trabajos, la salud”, explica Claudia Campos, una psicóloga colombiana que trabaja en Washington DC.
“Particularmente cuando hay niños, es importante reír, ver películas que nos hagan sonreír, comedias, para activar las endorfinas. El sentido del humor y el bienestar nos producen más serotonina y endorfinas y, por tanto, nos producen un mayor bienestar, que a su vez fortalece nuestro sistema inmunológico”, añade.
Por su parte, Cecilia Carvajal, psiquiatra del Centro Médico Docente La Trinidad, en Caracas (Venezuela), advierte además contra la tentación de dejarse arrastrar por pensamientos negativos.
“Cuando estamos solos o estamos aislados, vemos una catástrofe desde el presente, el futuro, las consecuencias, y lo importante es ir viviendo el día a día. Eso nos permite tener sentido del humor… el humor es un granito de arena más”, explica.
“El humor es maravilloso tanto para el que lo produce como el que lo recibe”, añade, “y ayuda mucho a llevar estos momentos difíciles a los profesionales de la salud, a los que quedan encerrados o están aislados de sus familias”.
Si bien la mayoría de memes buscan provocar risas, también los hay que recurren al humor negro o se burlan de las víctimas de la epidemia. Las expertas consultadas recomiendan evitar esas imágenes, sobre todo si inciden en alusiones racistas o xenófobas, que además pueden incitar actos de violencia contra minorías, como la población asiática.
Los virus no tienen nacionalidad “ni conocen fronteras ni les importa tu etnia, el color de tu piel o cuánto dinero tienes en el banco”, ha advertido Mike Ryan, director ejecutivo de los programas de emergencias de la Organización Mundial de la Salud.
"Es muy importante que tengamos cuidado con el lenguaje que usamos, porque puede conducir a la discriminación de individuos asociados con el virus”, agregó.
Según las expertas consultadas, lo que se requiere ahora es empatía, es decir, la capacidad para ponerse en el puesto de la otra persona y ofrecer apoyo.
“Siempre hago énfasis en los afectos; el afecto es lo que más cura, lo que más tranquiliza, y hacer sentir nuestra presencia con nuestros seres queridos, estén cerca o lejos”, dijo Carvajal.
Siete consejos prácticos
Carvajal y Campos coinciden en varias formas de cuidar la salud emocional, y de asimilar y sobrellevar esta crisis, aún cuando no se sabe cuánto durará o si regresará en otoño.
- Aceptar que sentir miedo es natural y sirve para generar alerta y acción; por eso no es recomendable embotellar las emociones, sino expresarlas.
- Identificar lo que se siente y cómo está respondiendo el cuerpo: rabia, tristeza, ansiedad, insomnio, cambios de apetito, o irritabilidad.
- Mantener una rutina diaria, bañarse y vestirse como para ir al trabajo, y hacer un plan de actividades.
- Hacer ejercicio o salir a caminar, y alimentarse bien.
- Crear un calendario con los niños, y ayudarles a colocar calcomanías que reflejen lo que ellos están sintiendo. Hacer lectura y compartir juegos en familia
- Cuidar y mantenerse en contacto con los abuelos, amigos y familiares a través de las redes y aplicaciones sociales.
- Para quienes sufren de ansiedad, es preferible reducir el consumo de noticias relacionadas con la salud.
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