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AMLO promete ser “más eficaz” tras días sin respuesta a los feminicidios. En la calle, se convoca un “día sin mujeres”

El presidente mexicano sugiere crear una fiscalía especializada mientras el Congreso impulsa una reforma para aumentar las penas por delitos contra las mujeres.

Tras días de insistir en que los feminicidios que han conmocionado a México son un supuesto problema neoliberal y que su Gobierno ya está atendiendo el asunto pero sin aclarar cómo, el presidente, Andrés Manuel López Obrador (apodado AMLO), cambió ligeramente su tono este miércoles, y prometió que será más "concreto y eficaz" en el combate a la violencia contra las mujeres.

Para ello, abrió la puerta a la posible creación de una fiscalía federal especializada en feminicidio "en caso de que se requiera". Ya existen fiscalías con especialización a niveles locales, aunque no las hay en todos los estados; un análisis reciente indica que en las procuradurías estatales solo en uno de cada cinco casos los asesinatos de mujeres son revisados como feminicidio.

Además, el presidente se mostró dispuesto a incorporar tres de los temas de un pliego petitorio enviado por mexicanas que se han estado manifestando: que todos los funcionaros reciban capacitaciones en justicia con perspectiva de género; incorporar temas de feminismo a los libros escolares desde la primaria, en un esfuerzo para que se desaprenda el machismo que lleva, entre otras cosas, a la violencia sexual; y hacer una campaña nacional para concientizar sobre el machismo y denunciar la cultura machista.

"Vamos a ser más concretos, eficaces, llevar a la práctica" ese tipo de propuestas "muy buenas", declaró López Obrador en su conferencia de prensa matutina.

Hasta ahora, su Gobierno ha sido criticado de inacción respecto al tema. Llegó a sugerir en una ocasión que las noticias de feminicidio no debían opacar las del dinero para el sorteo que promueve relacionado al avión presidencial, por ejemplo. Y después fue acusado de rehusarse a hacer propuestas claras para prevenir el feminicidio, tras lo cual emitió un así llamado "decálogo" sin acciones concretas y con lugares comunes como: "Es una cobardía agredir a una mujer".

Más que cobardía, en México es un delito, pero su decálogo no lo menciona.

Revisión de los castigos

En esa línea, López Obrador también celebró la aprobación, el martes, de una posible reforma con la que aumentarán las penas de cárcel y las multas por feminicidio y abuso sexual de menores de edad.

Un memorial con fotos de mujeres asesinadas colocado durante una protesta en Tijuana.
Un memorial en honor a mujeres asesinadas colocado afuera de las oficinas de la policía durante una protesta en Tijuana, México, el sábado 15 de febrero de 2020.AP

Con la propuesta de la Cámara de Diputados también se endurecerá el castigo a los funcionarios públicos que resulten culpables de entorpecer las investigaciones.

Falta que el Senado vote respecto a las reformas sobre las penas de cárcel, con las que el castigo máximo por feminicidio pasará a ser de mínimo 45 años y máximo 65 en prisión. El abuso sexual de menores de 15 años se cambiaría a entre 10 y 18 años de cárcel (actualmente es de entre 6 y 13 años), y el acoso sexual se castigaría con una multa de hasta 800 días del salario que percibe el acusado.

Aunque expertas advierten que depender solo de mayores sanciones no basta.

"Con la impunidad que tenemos en el país, de más del 90% de casos, de qué sirve aumentar castigos que no se extienden", destacó en un foro la abogada feminista Andrea Medina Rosas, quien fue defensora en el caso de Campo Algodonero, cuando los deudos de mujeres asesinadas en Ciudad Juárez demandaron al Gobierno ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. (El fallo determinó que las instituciones en México violaron los derechos humanos al no investigar bien los casos ni castigarlos, y llevó a que el feminicidio fuera tipificado como delito en el Código Penal Federal).

Varios servidores públicos han sido acusados de cometer negligencias en el caso reciente del feminicidio de Fátima Andrighetti Antón, la niña mexicana de 7 años que fue encontrada muerta el fin de semana; sus familiares denuncian que hubo retrasos para emitir la alerta y empezar la búsqueda, así como traspiés en los protocolos sin los cuales "pudo haber sido encontrada con vida", según la tía de la menor.

Tras la muerte de Fátima, la investigación está avanzando; las autoridades ya identificaron a la mujer que secuestró a la menor y a un presunto cómplice.

Pese a su cambio de talante, este miércoles AMLO también mantuvo una postura que se le ha criticado en días recientes. Volvió a sugerir que "la paz y la tranquilidad", para erradicar temas como la violencia hacia las mexicanas, no solamente surgen de leyes y medidas de justicia, sino de lo que llamó el deber de "moralizar o purificar la vida pública". 

Se refirió al combate a la corrupción que ha prometido para decir que con eso se reducirá la delincuencia y puso como ejemplo a Dinamarca; dijo que en ese país, que tiene la menor percepción de corrupción según un índice anual, no hay pobreza ni inseguridad. (Dinamarca es de las naciones europeas con mayores tasas de violencia sexual).

A decir del presidente, que se proclama de izquierdas, hay una descomposición social en México que significa una "pérdida de valores" debido al "modelo neoliberal", y eso es lo que fomenta la violencia. Para combatir ese presunto problema, dijo que necesita "procurarse la unidad en las familias" para "fortalecer valores morales".

Aunque su propio Gobierno ha impulsado acciones que, según activistas, afectan a las familias. Por ejemplo, redujo el presupuesto de los albergues para mujeres y madres víctimas de violencia doméstica, y también recortó los fondos para estancias infantiles, donde familias de escasos recursos o que necesitan trabajar largas jornadas pueden acudir para asistencia en la crianza.

Esos recortes están "indirectamente relacionados con los asesinatos que hemos tenido, pero sí fomentan un clima de discriminación contra la mujer y de cierta manera de violencia contra la mujer", dijo a Noticias Telemundo la académica Ana Pecova, experta en temas de acceso a la justicia.

Alistan mexicanas a "un día sin mujeres"

Las mujeres que se han estado manifestando en las últimas semanas en todo México lanzaron una nueva campaña después del caso de Fätima y ahora preparan una jornada con la que buscan hacer énfasis en el papel que tienen en la vida diaria.

Ante el enojo de los casos sonados de feminicidio, se prepara un paro nacional el 9 de marzo, el día después de que miles planean marchar por el Día Internacional de la Mujer.

La intención del paro, que se ha promovido como "Un día sin mujeres" o "Un día sin nosotras", es demostrar la importancia de las mexicanas en todos los ámbitos para instar a la sociedad civil, a las autoridades y a otros a trabajar contra la impunidad en casos de violencia de género.

Ya ha habido iniciativas similares, como el #NosotrasParamos de 2017 para vestirse de negro y no trabajar, pero no habían sido convocados a nivel nacional.

En México cada día son asesinadas diez mujeres, según un análisis de la ONU hecho a partir de datos oficiales. En los últimos cinco años los reportes de feminicidios aumentaron 137% y los de feminicidos infantiles, como el de Fátima, subieron en 96%.

Sin embargo, en muy pocos casos de México la investigación resulta en una condena; analistas calculan que sucede en solo 3 de cada 100 casos en los que la víctima es un menor de edad, por ejemplo.

"La erradicación del feminicidio solo puede surgir de la erradicación entera de la violencia feminicida, todos los hechos que violentan los derechos humanos de las mujeres y niñas", señaló la académica Marcela Lagarde, quien acuñó el término de feminicidio, en una conferencia. "Y el Estado es parte de esa violencia".

Lagarde lamentó que el presidente López Obrador se haya quejado en los últimos días de que antes de él supuestamente no se hablaba del feminicidio como ahora, pues dijo que desde hace varios años se ha movilizado por eso. Y la académica agregó: "Lo que se necesita impulsar es una transformación del Estado que sí sea con perspectiva de género", en aparente referencia a que AMLO llama a su Gobierno la Cuarta Transformación del país.

 

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