Un tribunal federal de Missouri sentenció a las empresas alemanas Bayer y BASF a pagar 265 millones de dólares a una pareja de agricultores que denunció que sus cultivos de duraznos habían sido destruidos por un pesticida creado por dichas compañías.
El jurado del tribunal de Cape Girardeau dictó esa sentencia tras una denuncia de Bill y Denise Bader, dueños de Bader Farms, uno de los mayores productores de duraznos de Missouri, quienes afirman que ambas compañías animaban a otros agricultores a usar el pesticida dicamba de forma irresponsable.
En su acusación, también alegan que las compañías conspiraron para desarrollar una semilla tolerante al dicamba, lo que obliga a los agricultores a comprarles para evitar que sus producciones sean dañadas, según afirma el Southeast Missourian.
El dicamba es un pesticida popular, pero controvertido, ya que tiende a matar los cultivos en los campos vecinos de donde se utiliza. Se expande fácilmente y acaba con las plantas que no están adaptadas al producto.
Este es el primer juicio en Estados Unidos sobre el pesticida dicamba, que lleva muchos años en el mercado, y es relevante ya que le abre la puerta a otras 140 demandas que hay sobre el uso del mismo pesticida, según ha publicado la agencia Bloomberg.
Esta decisión judicial llega después de otro caso en el que Bayer fue condenada por un jurado californiano a pagar 290 millones de dólares a un jardinero enfermo de un cáncer incurable. Esa sentencia fue por no haber informado bastante de la peligrosidad del RoundUp, otro controvertido pesticida.
Bayer, que asegura que el dicamba es inocuo para los cultivos si los agricultores siguen las instrucciones, anunció que tenía intención de apelar la sentencia "lo antes posible".
BASF también quiere "utilizar todos los medios legales a disposición" para impugnar el fallo, dijo el lunes un portavoz de la compañía.
Bayer compró en 2018 el gigante estadounidense de los cultivos transgénicos y las semillas Monsanto, y tuvo que ceder a BASF una parte de sus actividades agroquímicas para respetar las normas de la competencia.