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Aumentan aún más los soldados estadounidenses afectados por “heridas invisibles” tras un ataque con misiles de Irán

Al menos 64 militares sufrieron traumatismos cerebrales, según el Pentágono. Sus efectos pueden aparecer tiempo después de sufrirlas. La semana pasada Trump los definió “dolores de cabeza” y dijo que no eran “muy graves”
Militares estadounidenses inspeccionan un punto golpeado por los misiles iraníes en la base de Ain al-Asad, en Irak.
Militares estadounidenses inspeccionan un punto golpeado por los misiles iraníes en la base de Ain al-Asad, en Irak.

El Departamento de Defensa ha vuelto a rectificar al alza este jueves el número de militares estadounidenses afectados por un ataque con misiles de Irán a principios de este mes: ahora resultan ser al menos 64 los militares que sufrieron traumatismos cerebrales —problemas no siempre identificables de inmediato— tras las explosiones, ocurridas en dos bases de Irak en las que ellos se encontraban desplegados. 

El Pentágono determinó que los 64 estadounidenses fueron diagnosticados todos con algún tipo de “lesión cerebral traumática leve” (TBI, por sus siglas en inglés). Más de la mitad de ellos, 39, ya regresaron al servicio, apuntan las cadenas NBC News y CNN. La cifra indicada este jueves, adelantada por CNN, representa un incremento  respecto a la indicada a principios de esta semana, cuando el Pentágono dijo que habían sido identificados 50 casos.

Irán utilizó el ataque, que se produjo el pasado 8 de enero, como una respuesta al operativo militar estadounidense que, por orden del presidente Trump, mató al general iraní Qassem Soleimani, considerado un actor clave de la política hostil de Teherán contra Estados Unidos. Esta operación se llevó a cabo en Bagdad, la capital de Irak, país donde Irán busca ejercer influencia político-militar y Washington mantiene tropas desplegadas en el marco de sus planes de política exterior.

Problemas no evidentes a primera vista

A diferencia de las heridas físicas, como quemaduras o mutilaciones, las lesiones cerebrales traumáticas no son obvias y pueden llevar tiempo diagnosticarlas, señala The Associated Press, que las define “heridas de guerra invisibles”.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) explican que la mayoría de las personas que los sufren se recuperan bien, pero en algunos casos, los síntomas pueden permanecer durante “días, semanas, o más tiempo”.

Entre las posibles consecuencias de estos traumas, los CDC indican sensaciones físicas como dolores de cabeza, visión borrosa, vómitos o problemas de equilibrio, pero también otras como problemas de tipo emocional y ansiedad o de sueño

Oficiales del Pentágono señalaron a CNN que los casos diagnosticados podrían seguir aumentando. El general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto, afirmó que miles de personas se encontraban en la base aérea de Ain al-Asad, una de las dos atacadas por Irán, y los que estaban cerca de las explosiones han sido examinados. 

“Seguiremos monitoreándolos el resto de sus vidas”, afirmó Milley, según reporta NBC News, “y continuaremos brindando el tratamiento que sea necesario”. 

El diario The New York Times recuerda que en los primeros años de las guerras en Irak y Afganistán los militares estadounidenses que sufrían los traumatismos cerebrales en situaciones de conflicto solían ser devueltos al servicio rápidamente porque estos problemas podían no manifestarse antes de semanas o meses más tarde.

Para Trump es solo “dolor de cabeza”

El presidente, Donald Trump, dijo la semana pasada que había oído que militares estadounidenses en Irak tenían “dolores de cabeza”, pero que se trataba de problemas “no muy graves”. “No me parecen lesiones muy graves, respecto a otras que he visto”, afirmó. 

Tras el ataque, tanto él como el Pentágono habían informado que ningún estadounidense murió o resultó herido en el ataque con misiles iraní. Solo la primera de las dos afirmaciones ha resultado ser certera, según la información trascendida hasta el momento. 

William Schmitz, comandante nacional de los Veteranos de Guerras Extranjeras, pidió la semana pasada al gobierno de Trump no tomar a la ligera el problema de los traumatismos cerebrales. "Se sabe que la TBI causa depresión, pérdida de memoria, dolores de cabeza severos, mareos y fatiga, a veces con efectos a largo plazo ", dijo, al solicitar a Trump que se disculpe por los que definió como “comentarios equivocados".

El representante Bill Pascrell Jr., demócrata por Nueva Jersey, criticó al mandatario por mostrar "una clara falta de comprensión de los efectos devastadores de la lesión cerebral”.

El secretario de Defensa, Mark Esper, dijo este jueves que Trump "comprende la naturaleza de estas lesiones" y “está muy preocupado” por la salud y el bienestar de los soldados estadounidenses. 

Por Francesco Rodella

Mire también: El Pentágono revela la cifra de soldados heridos en ataque de misiles por Irán