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Así aprendió a jugar Kobe Bryant: “No te preocupes, hijo, te vamos a querer si anotas cero o 50”

Con sólo seis años empezó a jugar básquetbol en un pueblito italiano. Cuando volvió a Estados Unidos: “No marqué un solo punto durante todo el verano. Ningún punto. Ni siquiera un tiro libre. Nada, cero".

Como muchas otras partes del mundo, el municipio italiano de Reggio Emilia se sumó a los lamentos por la muerte de la estrella estadounidense del baloncesto Kobe Bryant, pero en este caso con un sentimiento de cercanía especial: "Mi historia comenzó en esta ciudad, fui a la escuela acá. Mi sueño comenzó en Reggio”, dijo el deportista en una entrevista en 2016 al medio local Il Resto del Carlino

Bryant, fallecido este domingo en un accidente de helicóptero en Los Ángeles (California), vivió siete años en Italia, donde su padre, Joe Jellybean Bryant, se mudó para jugar básquetbol profesional. Fue ahí, según describe el diario The Washington Post, donde Bryant aprendió a lanzar y encestar aún siendo un niño.

“¿Por qué estoy tan apegado a Reggio? Porque tengo tantos recuerdos especiales. Aquí podría andar en bicicleta, ir a comer helado con mis amigos. Hermosas sensaciones”, recordó en la citada entrevista, concedida poco después de su retiro como profesional en 2016.

En aquella oportunidad, Bryant llegó de sorpresa a Reggio para ofrecer clases de básquetbol a niños de su antigua academia. 

La ciudad, de 170,000 habitantes, se ubica en el norte de la región Emilia Romagna, a la que también pertenecen ciudades como Bologna y Parma.

“Cuando llegamos, hace un rato, estaba en el auto y les decía a mis compañeros: ¿Alguna vez habrían pensado que uno de los mejores jugadores de la NBA podría crecer aquí? No hay nada más lejos de Los Ángeles. Significa que cada sueño es posible”, dijo Bryant sobre la visita.

Tenía 6 años cuando llegó a vivir a Italia. De inmediato comenzó a jugar en un equipo para niños, con aros y una cancha más pequeños. “Aprendí lo básico: pases, pantallas, mover el balón y lanzar (...) Esos fundamentos me ayudaron a entender el juego y es como hoy lo enseño”, recordó el basquetbolista en una entrevista con Slam.

 

La experiencia no fue fácil para Bryant, quien en un comienzo no entendía el idioma italiano y era uno de los pocos niños afroamericanos en ese país. Tampoco fue sencillo volver a Estados Unidos. Un verano Bryant viajó a Filadelfia para jugar contra niños estadounidenses, aunque sin la mejor suerte.

“No marqué un solo punto durante todo el verano. Ningún punto. Ni siquiera un tiro libre. Nada, cero. Mi padre me habló después de eso: ‘Hijo, no te preocupes. Te vamos a querer si anotas cero o 50’", recordó Bryant en una entrevista con ESPN

Bryant regresó definitivamente a Estados Unidos justo antes de comenzar la secundaria, a los 14 años. Y así como antes le costó aprender el italiano, de vuelta en Filadelfia debió aprender otra forma de comunicarse. “Los chicos no hablaban inglés, hablaban slang (lenguaje informal). Yo no entendía de qué hablaban. Pero la manera de hacer amigos fue jugando básquetbol. Ese es el lenguaje universal”, dijo Bryant.

Apenas unos años después, cuando tenía 17, ya había sido elegido por Los Angeles Lakers para defender su camiseta y ganar cinco anillos de campeón de la NBA y dos medallas olímpicas para Estados Unidos.

Para Bryant, Italia siempre fue un hogar. Fueron varias las veces que regresó a ese país ya sea para tomar vacaciones, como para sorprender a otros niños con una clase de básquetbol. Y el pueblo que lo vio nacer como jugador, hoy lo recuerda como uno de los suyos.

“Por siempre será uno de los nuestros”, escribió el equipo de básquetbol italiano Pallacanestro Reggiana, en su página en Facebook. “Kobe Bryant creció aquí y fue, para todos nosotros, un Reggianio”, dijo el alcalde de la ciudad, Luca Vecchi.

Stefano Bonaccini, gobernador de la provincia Emilia Romagna, lo resume así: “El fue un gran campeón y una gran persona, unido a nuestra tierra, así como nuestra tierra estaba unida a él”.

Por Felipe Gálvez