Los teléfonos alrededor de la ciudad de Nueva York zumbaron el miércoles por la tarde con advertencias sobre una inminente turbonada de nieve, por lo que muchos tuvieron que hacerse la pregunta: '¿Y eso qué es?'
Se trata de un concepto relativamente nuevo: solo se les dio un nombre en noviembre de 2018, cuando el Servicio Meteorológico Nacional declaró que comenzaría a emitir advertencias sobre estos fenómenos, que consisten en nevadas repentinas, moderadamente intensas con fuertes vientos en la superficie que dispersan la nieve, dijo la meteoróloga de NBC News, Kathryn Prociv.
"Las turbonadas de nieve son el equivalente invernal de tormentas eléctricas severas y suelen ser bastante comunes en esta época del año", explicó Prociv. "Se desplazan rápidamente. En un segundo puede haber sol; al segundo siguiente hay nieve".
La meteoróloga publicó en su cuenta de Twitter un video editado que resume en pocos segundos cómo se produce el fenómeno meteorológico.
Muchas personas acudieron también a esa red social para bromear sobre el clima, pero las turbonadas de nieve pueden ser peligrosas porque afectan la visibilidad y pueden surgir repentinamente.
En la ciudad de Nueva York, los residentes fueron advertidos por primera vez de 30 a 40 minutos antes de que ocurriera, pero no es raro que se produzcan en cuestión de segundos, sin tiempo para una advertencia.
La advertencia del Servicio Meteorológico Nacional el miércoles estuvo vigente hasta las 5:30 p.m. y se extendió al este sobre Long Island.
Si bien la tormenta tenía solo 10 millas de ancho e iba pasar por cualquier lugar en 30 minutos o menos, el Servicio Meteorológico predijo que podría dejar hasta una pulgada de nieve. Alrededor de cuatro décimas de pulgada de nieve cayeron cuando la tormenta pasó por Central Park.
Cuando la ciudad de Nueva York experimentó su primera advertencia de turbonada de nieve en enero pasado, se produjo confusión sobre qué hacer durante el evento meteorológico. Los meteorólogos recomiendan permanecer en interiores y evitar conducir, ya que las tormentas pueden afectar las carreteras y provocar accidentes.