Rudolph W. Giuliani, el abogado personal del presidente de EEUU, afirmó este lunes que le proporcionó a Trump información detallada sobre cómo la embajadora de los Estados Unidos en Ucrania estaba, en opinión su opinión, obstaculizando investigaciones que pudieran beneficiar a Trump, de modo que pusieron en marcha su destitución.
En una entrevista, Giuliani describió cómo transmitió a Trump "un par de veces" relatos sobre cómo la embajadora, Marie L. Yovanovitch, había frustrado los esfuerzos que podrían ser políticamente útiles para el triunfo del mandatario. Incluyeron investigaciones que involucraron al exvicepresidente Joseph R. Biden Jr. y ucranianos que difundieron documentos que dañaron la campaña de 2016 de Trump.
El presidente a su vez conectó a Giuliani con el Secretario de Estado Mike Pompeo, quien solicitó más información, dijo Giuliani. En cuestión de semanas, Yovanovitch fue revocada como embajadora a finales de abril y se le dijo que Trump había perdido la confianza en ella.
Las circunstancias de la expulsión de Yovanovitch después de una campaña de desprestigio diseñada en parte por Giuliani se documentaron durante el testimonio ante el Comité de Inteligencia de la Cámara, donde fue testigo clave en los procedimientos de juicio político contra el Trump. Giuliani no ha ocultado su papel en señalar las preocupaciones sobre Yovanovitch.
Pero el relato de Giuliani, en una entrevista con The New York Times este lunes por la noche, proporcionó detalles adicionales sobre el conocimiento y la participación del presidente en un elemento de una campaña de presión contra Ucrania.
La entrevista de Giuliani se produjo cuando la Cámara se preparó para una votación el miércoles para acusar a Trump. Los artículos de juicio político presentados por los demócratas acusan al presidente de abusar del poder de su oficina para presionar a Ucrania para que lo ayude políticamente y de obstruir el Congreso al bloquear el testimonio de funcionarios clave.
Durante varias semanas de testimonio, los demócratas reunieron un caso en el que Trump retuvo la ayuda militar de Ucrania y negó a su presidente una reunión de la Oficina Oval mientras buscaba un compromiso de los ucranianos para las investigaciones promovidas por Giuliani.
En conversaciones en los primeros meses del año con el presidente, Giuliani, por su cuenta, calificó Yovanovitch de impedir no solo las investigaciones en Ucrania que podrían beneficiar al presidente, sino también los esfuerzos de Giuliani para reunir pruebas para defender él, y apuntar a sus rivales en los Estados Unidos.
"Hay muchas razones para trasladarla", dijo Giuliani, afirmando que sus informes sobre Trump y Pompeo probablemente jugaron un papel en su decisión de retirar a la entonces embajadora. "Creo que mi información lo hizo", dijo. "No lo sé. Tendrías que preguntarles a ellos. Pero confiaron en ello”, aseguró.
Agregó que no recomendó que Trump o Pompeo retiraran a Yovanovitch. "Simplemente les di los hechos", aseveró. “Quiero decir, ¿pensé que debería ser retirada? Pensé que debería haber sido despedida". Él dijo: "Si yo fuera fiscal general, la habría echado. Quiero decir, secretario de Estado".
El testimonio en los procedimientos de juicio político y otra información han demostrado que las afirmaciones del abogado sobre Yovanovitch no tenían fundamento o estaban fuera de contexto. En la entrevista, se retrató a sí mismo como personalmente involucrado en el esfuerzo por descarrilar a un diplomático de carrera en el momento en que estaba considerando arreglos comerciales con algunos de los ucranianos canalizando información hacia él.
Giuliani le dijo al presidente y a Pompeo que Yovanovitch estaba bloqueando las visas para que los fiscales ucranianos vinieran a Estados Unidos a presentarle pruebas, y también a las autoridades federales, que afirmó que podrían dañar a Biden y a su hijo Hunter Biden, y a los ucranianos que distribuyeron documentos que llevaron a la renuncia del presidente de campaña de 2016 de Trump, Paul Manafort.
Giuliani también afirmó, en base a sus propias entrevistas con esos fiscales, que Yovanovitch había tratado de bloquear las investigaciones en Ucrania. Y transmitió vagas afirmaciones de que ella había estado hablando mal del presidente.
La exembajadora de EEUU en Ucrania, Marie Yovanovitch, el viernes 15 de noviembre de 2019, durante la segunda audiencia pública del juicio político a Trump. (AP Photo/Andrew Harnik)
"Creo que le había señalado al presidente un par de veces, le informé al presidente lo que había aprendido sobre las denegaciones de visas", dijo Giuliani, así como las afirmaciones de que le ordenó a un fiscal ucraniano que retirara los casos. "Puedo o no haber transmitido el chisme general de que la embajada se consideraba políticamente fuera de control, pero eso fue, no lo informé como un hecho".
Giuliani le había dicho a The New Yorker en un artículo publicado el lunes que necesitaba a Yovanovitch "fuera del camino" y que ella "iba a dificultar las investigaciones para todos".
Yovanovitch, una veterana del Servicio Exterior de 33 años, testificó en los procedimientos de juicio político que Giuliani ayudó a dirigir una campaña de desprestigio contra ella basada en lo que describió como mentiras escandalosas, y describió al Departamento de Estado como servicial las exigencias del presidente.
No hay evidencia de que ella haya menospreciado a Trump, ni de que haya emitido una lista de no procesar, como afirmó una vez las fuentes del fiscal de Giuliani.
Pero, según el relato de Giuliani este lunes, la información que estaba difundiendo sobre ella parecía encontrar una audiencia receptiva en los niveles más altos del gobierno de Estados Unidos y llevó a Trump a involucrar a Pompeo.
Giuliani le dijo a The Times que después de informar al presidente sobre los reclamos, este le dijo "o 'discuta con Mike' o 'entregue a Mike'". El abogado dijo que no podía recordar "si él llamo o le llamaron, pero nos unió para que Pompeo pudiera evaluarlo ".
La cuenta de Giuliani de las llamadas telefónicas con Pompeo parece ser corroborada por correos electrónicos lanzados por el Departamento de Estado a un grupo liberal de vigilancia que había presentado una demanda de registros públicos. Los correos electrónicos reflejan al menos dos llamadas telefónicas entre los dos a finales de marzo, incluida una que fue organizada con la guía del asistente personal de Trump.
Giuliani dijo que Pompeo le preguntó si tenía algo por escrito, por lo que Giuliani envió una línea de tiempo que enumera los eventos relacionados con algunas de las afirmaciones sobre Yovanovitch, el trabajo de los Biden en Ucrania y otros asuntos.
Posteriormente, Pompeo solicitó información más detallada, dijo Giuliani, por lo que hizo que alguien entregara personalmente en la oficina de Pompeo un sobre que contenía una serie de memorandos que detallaban las afirmaciones hechas por un par de fiscales ucranianos en entrevistas realizadas por Giuliani y su asociados en enero. La existencia de esos memorandos se ha informado previamente, al igual que la esperanza de Giuliani de que Pompeo los pase a los investigadores del Departamento de Estado y al FBI. como una forma de provocar una investigación en Estados Unidos que podría beneficiar a Trump.
"Lo que pensé era que es un tipo realmente inteligente va a ver qué más está involucrado", afirmó Giuliani, refiriéndose al señor Pompeo. "Y luego él será el que lo refiera al FBI. Y tal vez se lo quitarán y tampoco parecerá que estoy presionando al FBI para hacerlo."
Una de las entrevistas detalladas en un memorando enviado a Pompeo se realizó por teléfono con Viktor Shokin, un exfiscal ucraniano a quien el Departamento de Estado le negó una visa. Se le negó la visa porque se vio que había malgastado el dinero de asistencia estadounidense que se había asignado a su oficina para programas anticorrupción, según el testimonio en la investigación de juicio político.
Viktor Shokin, exfiscal ucraniano, en 2015 en Kiev, Ucrania. AP/Sergei Chuzavkov
Shokin "quería venir a Estados Unidos para compartir información que sugiriera que hubo corrupción en la Embajada de los Estados Unidos", declaró George P. Kent, un funcionario del Departamento de Estado. "Conociendo al Sr. Shokin, tenía plena fe en que era un montón de tonterías, y él estaba buscando participar básicamente en un juego de venganza porque había perdido su trabajo".
Otro fiscal ucraniano, Yuriy Lutsenko, había viajado a Nueva York para ser entrevistado por Giuliani durante horas durante dos días en enero, y la información que transmitió se incluyó en las notas enviadas al Pompeo.
Los esfuerzos de Giuliani en Ucrania han sido objeto de escrutinio por parte de fiscales federales que examinan si violó las leyes que requieren que los estadounidenses divulguen públicamente cuando presionan a los funcionarios del gobierno o se comunican con periodistas en nombre de intereses políticos extranjeros.
Sin embargo, Giuliani viajó a Europa este mes, según lo informado por primera vez por The New York Times, para reunirse con algunos de esos mismos fiscales ucranianos para continuar reuniendo información para tratar de socavar el caso de juicio político, incluso a través de una serie de programas en una red de cable conservadora.
Trump ha dicho que Giuliani presentará un informe de sus hallazgos al Fiscal General William P. Barr y al Congreso. Giuliani ha compartido cierta información reunida en el viaje con Trump, pero "no demasiada", dijo el presidente a los periodistas este lunes. Agregó que Giuliani "sabe lo que está haciendo".
Giuliani no quiso comentar sobre ninguna conversación con Trump sobre el informe de su viaje más reciente. Dijo que no ha hablado con Barr al respecto. Él ha hablado con "varios" miembros del Congreso sobre sus hallazgos, dijo, pero no los identificó, explicando: "Todo es muy confidencial".
RELACIONADAS:
El abogado de Trump llama por error a una cadena de noticias mientras habla de los Biden y dinero
El Congreso estrecha el cerco a Rudy Giuliani por la trama de Ucrania