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Una madre dijo que sus hijos de 8 y 4 años se ahorcaron. Ahora ha sido acusada de sus asesinatos

Lisa Rachelle Snyder dijo que acababa de encontrar que su hijo de ocho años y su hija colgando de los extremos de un cable en su sótano. Pero la explicación de sobre las trágicas muertes de sus hijos pequeños nunca encajó bien con las autoridades
Midsection Of Woman Hands Tied With Cuffs
Una mujer esposada.Getty Images/EyeEm / Getty Images/EyeEm

Una llamada al 911 envió auxilio a una modesta casa de ladrillos en la zona rural de Pensilvania la tarde del pasado 23 de septiembre, según publica The Washington Post.

Una madre dijo que acababa de encontrar a hijo de ocho años y su hija de cuatro colgando de los extremos de un cable de perro envuelto alrededor de una viga de soporte y no respondían. El niño, según declaró la madre, estaba siendo "intimidado en el colegio y había amenazado con hacerlo, pero no quería irse solo".

Pero la explicación de Lisa Rachelle Snyder sobre las trágicas muertes de sus hijos pequeños, Conner y Brinley, nunca encajó bien con las autoridades. "Sería seguro decir que inmediatamente tuvimos preguntas", dijo este lunes el fiscal de distrito del condado de Berks, John T. Adams, en una conferencia de prensa. "Los niños de ocho años, en general, que yo sepa, no se suicidan, así que, por supuesto, teníamos preguntas".

Ahora, después de meses de investigación, los funcionarios creen que han llegado al fondo de un incidente impactante que ha sacudido a la comunidad de Albany Township ubicada a unas 75 millas (120,7 kilómetros) al noroeste de Filadelfia. Los hermanos no se ahorcaron, alegan los investigadores, fueron asesinados por su madre.

Este lunes, la policía estatal de Pensilvania detuvo a Snyder en su casa y la acusó de matar a Conner y Brinley. Un hombre de 36 años también ha sido acusado de poner en peligro el bienestar de los niños, entre otros cargos, y está detenido sin fianza en la prisión del condado de Berks, según los registros judiciales. El abogado de Snyder no pudo ser contactado para hacer comentarios el martes temprano.

Si bien Adams dijo que Snyder sostiene que sus hijos se suicidaron, ella también "le había expresado a una amiga que ya había tenido suficiente". Agregó que Snyder supuestamente buscó en Google métodos de asesinato y recientemente había comprado el plomo para perros que utilizaron para matarlos.

"No sé si hay alguna explicación para su comportamiento", dijo el fiscal. "No creo que pueda pararme aquí, ni nadie, y explicar la horrible pérdida de la vida de dos niños inocentes", añadió.

Cuando los primeros auxilios entraron al sótano de la casa de Snyder poco después de las 4:40 p.m. ese día de septiembre, encontraron al hermano y a la hermana colgados a tres pies de distancia, suspendidos de lo que la policía describió como "un cable de perro con recubrimiento de vinilo y extremos que contienen ganchos de seguridad giratorios", según una copia de una denuncia penal obtenida por Morning Call. Debajo de los niños había dos sillas de madera del comedor que habían sido derribadas, dijeron las autoridades.

Conner y Brinley fueron trasladados rápidamente a un hospital cercano. Tres días después, fueron retirados del soporte vital y declarados muertos con 14 minutos de diferencia, informó Lehigh Valley Live. Las autopsias determinaron que los niños habían muerto colgados y no se encontraron drogas en sus sistemas, confirmó Adams este lunes.

Al principio, Snyder estaba dispuesto a hablar con las autoridades. En dos entrevistas durante las primeras etapas de la investigación, Snyder informó que su hijo "había sido intimidado", y agregó que "le dijo en múltiples ocasiones que quería morir", según la denuncia. Snyder dijo que días antes de que lo encontrara en el sótano, Conner le había dicho: "Ya me habría matado, pero tengo miedo de irme solo". Snyder supuestamente agregó que sospechaba que Conner quería a su hermana con él "para que pudieran irse juntos ", escribieron las autoridades.

"Tiene sobrepeso, tiene un retraso en el habla, necesita ayuda adicional, es un poco más lento para entender las cosas, los niños se burlan de él porque está gordo", declaró Snyder a la policía.

Snyder dijo que su hijo había tenido problemas en la escuela desde el primer grado. En el momento de la muerte de Conner, él era un niño de tercer grado en la escuela primaria Greenwich-Lenhartsville, informó la llamada de la mañana en octubre.

"Me dice que odia la escuela, todos los días me dice que no quiere hablar de la escuela", dijo Snyder a los investigadores, indicando que el niño fue intimidado en el autobús. "Él acaba de llegar a casa y está enojado".

Después de la escuela el 23 de septiembre, Snyder recordó que Conner le preguntó a su hermana si quería construir un fuerte, y agregó: "Juegan abajo en el sótano todo el tiempo", dicen los documentos. Snyder dijo que Conner le preguntó si podía tomar las sillas de la cocina y el perro que había recogido esa mañana, según la policía.

Pensando que sus hijos estaban jugando, Snyder le dijo a las autoridades que lavaba la ropa y luego salió afuera con su perro durante aproximadamente 10 minutos. Cuando volvió a entrar, dijo que fue a ver qué querían sus hijos para cenar y encontró la escena espeluznante.

Snyder le dijo a la policía que trató de derribar a sus hijos ella misma, pero no pudo y rápidamente fue a buscar ayuda. Las autoridades alegan que Snyder "nunca regresó al sótano" después de llamar al 911. "Todos podemos pensar que una madre cuyos hijos se encuentran ahorcados haría todo lo posible para salvarlos", recordó Adams durante la conferencia de prensa del lunes. "No se hizo en esta situación"

Búsquedas en Google

La policía dijo que no pasó mucho tiempo para que la historia de Snyder comenzara a desmoronarse. Horas después de que Snyder informara haber descubierto a sus hijos, la policía registró la casa y recolectó el plomo del perro utilizado para los ahorcamientos, que fue etiquetado como "super" y "250 lbs", según la denuncia. Adams dijo a los periodistas que el perro de Snyder, que según los informes era una mezcla de husky y pit bull, solo pesaba alrededor de 50 libras.

Entrevistas adicionales con personas cercanas a la familia Snyder y empleados de la escuela arrojan más dudas sobre el reclamo de suicidio de la madre. "No hubo evidencia de acoso", declaró Adams a los periodistas el lunes, citando información proporcionada por miembros de la familia, numerosos funcionarios escolares y compañeros de clase. "La única persona que alguna vez indicó que alguien fue intimidado, que siendo Conner, fue el acusado".

Un terapeuta ocupacional que trabajó con Conner también les dijo a los investigadores que habría sido "extremadamente difícil" para el niño de ocho años, que lucha con "poca destreza", llevar a cabo los ahorcamientos solos. El fiscal dijo que la discapacidad de Conner le dificultaba atarse los zapatos, por lo que el niño "probablemente" no podría haber abierto el cierre del cable del perro.

A través de otro testigo, la policía se enteró de que tres semanas antes del incidente, Snyder había hablado de estar deprimida y dijo que "ya no le importan sus hijos", alegaba la denuncia. Los Servicios para Niños y Jóvenes del Condado de Berks se llevaron a Conner y a un hermano mayor de Snyder en 2014, informó Morning Call. Adams dijo que los niños fueron devueltos a su madre en febrero de 2015, pero se negaron a proporcionar más detalles sobre la situación.

Luego, en octubre, los investigadores obtuvieron acceso a las búsquedas de Google de Snyder. El 17 de septiembre, buscó "cuanto se tarda en morir con monóxido de carbono en el automóvil", dijo la policía. Esa misma semana, buscó en Google los "mejores episodios" de una serie documental sobre crímenes que narra historias reales sobre delincuentes que evitaron ser arrestados o capturados durante años, pero que finalmente fueron llevados ante la justicia, según la denuncia.

El día antes de que se encontraran a Conner y Brinley, la policía dijo que Snyder presuntamente buscó "ahorcarse" y visitó un sitio web que "describe una forma efectiva de ahorcar a una persona usando una suspensión simple".

Durante la conferencia de prensa de este lunes, Adams aplaudió a los investigadores por su "esfuerzo implacable para obtener la verdad de lo que ocurrió aquí". "Cada vez que cualquiera de nosotros tiene que investigar, enjuiciar casos que involucran el abuso o la muerte de un niño inocente, todo nos golpea en el corazón y es muy emotivo para todos", dijo. "Dos niños arrebatados a una edad tan joven, lo que parece ser muy inocentes, simplemente no es correcto y no es justo".

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