El presidente, Donald Trump, anunció durante una entrevista con el periodista conservador Bill O'Reily este martes que designaría a los cárteles de la droga en México como organizaciones terroristas por su papel en el tráfico de personas y estupefacientes.
“Serán designados… He estado trabajando en eso durante los últimos 90 días. Ustedes saben, designar no es tan fácil, tienes que pasar por un proceso, y estamos muy avanzados en ese proceso”, dijo durante la entrevista con el expresentador de la cadena Fox News Bill O’Reily.
"No voy a decir lo que voy a hacer, pero serán designados. Ya le he ofrecido a México. Me gusta mucho este presidente, más que el anterior, y en teoría este tiene tendencias socialistas, pero creo que es un buen hombre", agregó el mandatario.}
México respondió la tarde del martes mediante un comunicado de prensa diciendo que el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, buscaría una reunión "a la brevedad posible" con el secretario de Estado, Mike Pompeo, "a fin de discutir este tema de suma relevancia para la agenda bilateral".
Luego, el canciller mexicano dijo en la red social Twitter que su país defendería la soberanía nacional.
Ya el lunes Ebrard había rechazado que se designara a los cárteles mexicanos como grupos terroristas, en respuesta a la petición al gobierno estadounidense de la familia Lebarón, algunos de cuyos miembros fueron masacrados en un camino rural en el norte de México a principios de este mes, presuntamente por organizaciones criminales vinculadas al narcotráfico.
El canciller dijo que la designación de los cárteles como grupos terroristas no era una medida necesaria para combatirlos e insistió en que ello abriría la puerta a la intervención directa estadounidense, algo que el Gobierno mexicano “no va a permitir”.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, también dijo que su Gobierno no aceptaría la intervención directa de Estados Unidos, en el caso de que catalogara a los cárteles como grupos terroristas. "Nuestros problemas los vamos a resolver los mexicanos, no queremos la injerencia de ninguna potencia extranjera", dijo López Obrador este martes en su conferencia de prensa matutina.
Si bien las autoridades mexicanas ya cooperan con agentes estadounidenses del FBI (Buró Federal de Investigaciones) lo hacen en el marco de tratados de cooperación en materia de seguridad.
Familiares de las víctimas, nacionales tanto de Estados Unidos como de México, presentaron una solicitud el domingo en la página web de la Casa Blanca pidiendo que se designara a los cárteles como grupos terroristas. Esperaban juntar al menos 100,000 firmas para que el presidente Trump atendiera su petición.
“Sus actos desenfrenados de violencia y asesinato han invadido nuestras fronteras y creado una crisis internacional. Buscan poder político para crear un narcoestado en México (…) ¡Son terroristas, y es hora de reconocerlo!”, se lee en su solicitud.
El asesinato de nueve niños y sus tres madres de la familia LeBarón
El 4 de noviembre, seis niños y tres mujeres de la familia extendida LeBarón fueron asesinados en un camino rural en los lindes de los estados de Chihuahua y Sonora, a unas 70 millas de la frontera estadounidense. Esa mañana, tres camionetas con 14 niños y tres mujeres de esta familia de religión mormona partieron de la comunidad La Mora en una zona montañosa de Sonora. Poco después fueron emboscados por sujetos armados. Sólo ocho niños sobrevivieron al ataque.
Según la principal hipótesis del Gobierno mexicano se habría tratado de un caso de identidad confundida en medio de una disputa entre el grupo La Línea, parte del cártel de Juárez, y una célula del cártel de Sinaloa llamada Los Salazar, según Homero Mendoza Ruiz, jefe del Estado Mayor mexicano.
Sin embargo, Adrían LeBarón, abuelo y padre de algunas de las víctimas mortales, ha negado que se tratara de una confusión.