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Trump dice que apoya a manifestantes en Hong Kong pero no firma proyecto de ley para respaldarlos

El mandatario no firmó la resolución que aprobó el jueves el Congreso que apoya el reclamo de los ciudadanos de Hong Kong en contra de las presiones de Pekín. Insiste que el presidente chino es “un amigo”.
Un hombre es detenido por fuerzas policiales en Hong Kong, en medio de las protestas el pasado 18 de noviembre.
Un hombre es detenido por fuerzas policiales en Hong Kong, en medio de las protestas el pasado 18 de noviembre.AP / AP

Sin dar señales de querer tomar una clara postura, el presidente Donald Trump afirmó este viernes que apoya las demandas de los ciudadanas de Hong Kong en contra del gobierno de China, aunque al mismo tiempo considera al presidente de ese país Xi Jinping “como un amigo”, justo en medio de las negociaciones comerciales que sostienen Estados Unidos y China.

Las declaraciones del mandatario, otorgadas en una entrevista con Fox News, se producen dos días después de que el Congreso estadounidense aprobara un proyecto de ley que apoya "los derechos humanos y la democracia" en Hong Kong contra Pekín, y amenaza con suspender el estatus económico especial otorgado por Washington a la excolonia británica. 

Sin embargo, dicha resolución –que provocó mucha molestia en Pekín– aún no ha sido firmada por Trump para ser promulgada.

"Tenemos que apoyar a Hong Kong, pero también apoyo al presidente Xi", dijo Trump, sintetizando la complejidad del asunto para Washington. "Es mi amigo. Es un hombre increible", agregó el presidente.

Las protestas se desataron en marzo de 2019, un mes después de que el Buró de Seguridad de Hong Kong propusiera una enmienda que le permitiría a China continental extraditar a un residente de Hong Kong para ser procesado, enjuiciado y servir su sentencia en China. 

Esto alarmó a los ciudadanos de Hong Kong, ya que Pekín es conocido por sus abusos a las libertades civiles y a los derechos humanos en su sistema judicial y de justicia. Como ha sido ampliamente reportado en la prensa internacional, China conduce detenciones arbitrarias, lleva a cabo juicios sin debido proceso y emplea la tortura en sus cárceles y en centros de detención masivos. La transparencia es poca y el sistema favorece a los miembros del Partido Comunista de China. 

El miedo de quienes promueven la democracia en la región es que la ley de extradición sea una manera de facilitar la persecución y retaliación de los enemigos políticos de Pekín en Hong Kong.

En su entrevista de este viernes, el presidente Donald Trump aseguró también que "si no fuera por mí, Hong Kong habría sido borrado en 14 minutos", luego de pedirle al gobierno de China que no enviara fuerzas militares a reprimir las protestas que se han extendido por nueve meses,

Según el mandatario, China "tiene un millón de soldados fuera de Hong Kong, que no están yendo solo porque yo le pedí: 'Por favor no lo hagas. Estarías cometiendo un gran error. Tendrá un impacto tremendamente negativo en el acuerdo comercial".

Siguen las rencillas por acuerdo comercial

Las declaraciones de Trump se producen en medio de la negociación que aún mantienen Estados Unidos y China en búsqueda de alcanzar un acuerdo comercial. El presidente chino Xi Jinping afirmó este viernes que su país está dispuesto a lograr el acuerdo comercial, pero no tiene "miedo" a responder en caso de una guerra de aranceles.

"Si es necesario responderemos, pero hemos estado trabajando activamente para tratar de no tener una guerra comercial. Queremos trabajar para un acuerdo inicial sobre la base de mutuo respeto e igualdad", dijo Xi en esa reunión organizada en el New Economy Forum de Bloomberg, en Pekín.

Más de un mes después de que Estados Unidos anunciara un acuerdo de “fase uno”, ambos países no parecen estar más cerca de alcanzar un acuerdo definitivo. Hace dos días, Trump se quejó de que China no estaba haciendo suficientes concesiones para lograr el tratado.

China ha insistido en una reversión de los aranceles existentes, que Trump dijo no haber aceptado, mientras que Estados Unidos exigen a Pekín que se comprometa a comprar gran cantidad de productos agrícolas.

Las negociaciones también se han visto dañadas esta semana por un voto en el Congreso de Estados Unidos apoyando al movimiento prodemocracia de Hong Kong.

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