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España se hunde más en el bloqueo político tras unas elecciones que disparan la ultraderecha

Se convierte en tercera fuerza política un partido racista, xenófobo, ultranacionalista, y con políticas retrógradas para las mujeres y dañinas para los inmigrantes.

El Partido Socialista ha ganado las elecciones parlamentarias en España, pero tendrá muy complicado lograr los apoyos necesarios para gobernar. La derecha lo tendrá sin embargo aún más difícil, después del hundimiento del partido liberal Ciudadanos, y pese al fuerte ascenso de la formación ultraderechista Vox.

El líder socialista, Pedro Sánchez, decidió repetir las elecciones de abril al verse incapaz de formar Gobierno por su falta de entendimiento con el partido izquierdista Podemos. Esa repetición sólo ha beneficiado a la ultraderecha.

El Partido Socialista (PSOE) ha logrado 120 escaños de un total de 350, perdiendo tres respecto a abril. El Partido Popular, la formación conservadora de referencia, ha obtenido 87, frente a los 66 de abril, después de que su líder, Pablo Casado, optara por suavizar su giro hacia la derecha de las anteriores elecciones.

Ciudadanos, que se negó a negociar con el PSOE después de abril pese a que juntos hubieran podido gobernar el país y varias regiones clave, se derrumbó hasta casi bordear la desaparición, pasando de 57 a 10 escaños. Su líder, Albert Rivera, ha anunciado ya un congreso extraordinario que podría relevarle.

Podemos también podría haber pactado con el PSOE, pero su líder, Pablo Iglesias, fue incapaz de llegar a un entendimiento con Pedro Sánchez. Eso provocó una escisión en su formación: Más País, liderado por Íñigo Errejón, uno de los fundadores de Podemos pero muy crítico con el liderazgo de Iglesias.

Podemos ha conseguido 35 escaños, frente a los 42 de abril. Más País, sólo 3.

¿Quién ha ganado? La ultraderecha: Vox, un partido racista, xenófobo, ultranacionalista, y con políticas retrógradas para las mujeres y dañinas para los inmigrantes, ha obtenido 52 escaños (frente a los 24 de abril) y se ha convertido en la tercera fuerza política.

¿Quién ha perdido? Todos aquellos que en abril fueron incapaces de convertir el voto de los ciudadanos en una oportunidad para llegar a pactos y consensos que permitieran construir un Gobierno.

El Partido Socialista lo tendrá ahora más complicado, porque ha perdido casi un millón de votos y no le basta con alcanzar ahora sí un acuerdo con Podemos. Juntos, y con Más País, la escisión de Podemos, sólo suman 158 escaños. La mayoría absoluta son 176. Con el Partido Nacionalista Vasco, que en abril estaba dispuesto a apoyarles también, tampoco llegarían. Así, requerirá de varios apoyos más, o de que otros partidos no voten en su contra.

El Partido Popular tampoco podría gobernar ni con el apoyo de Vox y Ciudadanos. Su única posibilidad de entrar en el Gobierno sería aliarse con los socialistas, y formar lo que se ha venido a llamar un Ejecutivo de unidad nacional, reservado para periodos de gran inestabilidad y que nunca antes en democracia se ha probado.