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Beto O'Rourke se retira de la contienda por la candidatura presidencial demócrata

Beto O’Rourke anuncia el fin de su campaña por la candidatura presidencial demócrata.

Beto O'Rourke anució este viernes que pone fin a su campaña por la candidatura presidencial demócrata de 2020.

El texano dijo en una serie de tuits que su campaña "siempre se ha tratado de ver claramente, hablar honestamente y actuar decisivamente". Y añadió que "en ese espíritu" anunciaba que su servicio hacia el país no será como candidato o nominado (a la presidencia).

O'Rourke había dado inicio a  su campaña en marzo después del empuje que le dio una batalla muy cerrada en la que perdió una silla en el Senado frente a Ted Cruz.

Con solamente 47 años, O'Rourke era uno de los más jóvenes aspirantes a la Casa Blanca. Comenzó su candidatura con amplia popularidad, recopilando más de seis millones de dólares en su primer día como precandidato demócrata, pero su campaña rápidamente perdió fuerzas y no pudo igualar el entusiasmo, el interés y la recaudación de fondos de su campaña por el Senado en 2018.

"Estoy muy agradecido a todas las personas que formaron el corazón y el alma de esta campaña. Usted estuvo entre los cientos de miles de personas que hicieron una donación, se inscribieron para ser voluntarios o corrieron la voz acerca de esta campaña y nuestra oportunidad de ayudar a decidir la elección de nuestra vida", agradeció en otro de sus tuits.

Y pidió a sus seguidores: "Sigamos defendiendo sin temor los problemas y las causas que nos unieron. Ya sea para poner fin a la epidemia de la violencia de las armas o desmantelar el racismo estructural o enfrentar con éxito el cambio climático, continuaremos organizándonos, movilizándonos y actuando".

Además, agregó que trabajará en apoyar al candidato demócrata que llegue a enfrentar a Donald Trump en la contienda de 2020 y advirtió que cualquiera que sea, "seremos bien servidos por cualquiera de ellos".

En una publicación en su blog personal escribio agradecido a sus partidarios: "Enfrentamos el racismo institucional y sistémico y apuntamos a Donald Trump por su supremacía blanca y la violencia que ha alentado contra las comunidades que no se ven, rezan o aman como la mayoría en este país."

Varios candidatos demócratas tuitearon sus homenajes al O'Rourke después de su anuncio. Elizabeth Warren elogió su "compromiso para terminar con la violencia armada", mientras que Bernie Sanders le agradeció llevar a cabo una campaña "para unir a millones de personas". Joe Biden tuiteo que O'Rourke había inspirado a muchos.

O'Rourke, que representó a El Paso en el Congreso, ingresó a la carrera como uno de los candidatos más comentados después de su estrecha derrota ante el senador Ted Cruz en 2018 el Texas profundamente conservador. 

A pesar de la sacudida inicial de interés de los votantes y los medios de comunicación, su campaña no logró ponerse en pie después de varios debates en los que fue muy criticado. O'Rourke rechazó repetidamente las súplicas, incluso del consejo editorial de The Houston Chronicle, para que abandonara la carrera presidencial y volviera a presentarse al Senado en Texas contra el senador John Cornyn. 

La campaña de O'Rourke giró en torno a la necesidad urgente de luchar contra el cambio climático, las grandes corporaciones y la revisión del sistema de salud estadounidense, aunque no llegó a respaldar Medicare para todos. Apoyó la legalización de la marihuana y recibió aplausos por las formas en que discutió las disparidades raciales en Estados Unidos.

O’Rourke cambió su enfoque hacia el control de armas tras un tiroteo masivo el pasado agosto en El Paso, yendo más allá que la mayoría de los demás candidatos demócratas en apoyar no solo las verificaciones de antecedentes y una prohibición de armas de asalto sino un programa obligatorio de recompra de armas.

En la carrera por la nominación demócrata que empezó con 22 candidatos quedan 17. El exvicepresidente Joe Biden va en cabeza con un 26,7% y le sigue la senadora Elizabeth Warren, con 21,3%, según el promedio de Real Clear Politics. Les sigue el socialista Bernie Sanders (16,8%), el moderado Pete Buttigieg (7,7%), la senadora Kamala Harris (4,7%), y otra todavía larga serie de candidatos que no superan el 3%.
 

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