Un hombre del sur de California fue sentenciado a 11 años de prisión este martes por el asesinato de una excompañera de piso cuyo cuerpo fue descubierto esnterrado en una pared seis años después de su desaparición, dijeron los fiscales.
Randolph E. Garbutt, de 47 años, de Los Ángeles, se declaró culpable el mes pasado de un cargo de homicidio en la muerte de Raven Campbell, que por entonces tenía 31 años, dijo la Oficina del Fiscal del Distrito del Condado de Los Ángeles.
El 4 de junio de 2009, Garbutt golpeó a Campbell en la cabeza con un martillo dentro del Apartamento 507 en el Proyecto de Vivienda Harbor Hills donde vivían. Luego envolvió su cuerpo sin vida en plástico antes de enterrarla en una tumba improvisada detrás de la pared de un armarioUna persona anónima que llamó a la familia de Campbell y dijo que la mujer podría estar enterrada en la pared de un armario en el complejo de apartamentos, lo que llevó a la policía a usar perros entrenados para encontrar su cuerpo, informó NBC Los Ángeles en ese momento.
Mantuvo en secreto la ubicación de su cuerpo durante seis años hasta que un aviso anónimo a un miembro de la familia llevó al descubrimiento de sus restos dentro de la pared el 2 de julio de 2015. Su cuerpo fue encontrado detrás de una pared en un complejo donde ambos vivían, dijeron las autoridades. Campbell había sido reportada como desaparecida en junio de 2009. Los vecinos se habían quejado de un olor extraño durante años, informó la estación.
Algunos miembros de la familia de la víctima expresaron consternación por la sentencia dictada en el Tribunal Superior de Inglewood, calificándola de injusta y demasiado leve dada la gravedad del delito. Pero también dijeron que esperan que Randolph Garbutt cambie su vida mientras está en prisión.
La sentencia fue el resultado de un acuerdo de declaración de culpabilidad en el que Garbutt, de Los Ángeles, no se opuso al homicidio voluntario, el 12 de septiembre. Garbutt, que ha estado bajo custodia desde el 4 de febrero de 2016, ya recibió crédito por más de cuatro años de su condena de 11 años.
"Para enterrarla en una pared, la ironía es que este hombre probablemente solo hará tanto tiempo como ella mientras estaba en la pared", dijo la hermana de Raven Campbell, Cynthia Campbell Kemp, en la Corte. "Ese es el crimen. El castigo no es solo, sino que tendremos que aceptarlo".
Raven llamaba con frecuencia a sus familiares. Fue cuando las llamadas dejaron de llegar cuando su allegados temieron que algo le hubiera pasado. Su muerte aún afecta a su hijo, Nicholas, quien cumplirá 18 años a finales de este mes y ha comenzado a actuar, dijo Kemp: "Está devastado por esto".
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