Luis Fernando Carrillo Navarro, hijo del difunto narcotraficante Amado Carrillo (el Señor de los Cielos), fue acusado junto a otros dos hombres de haber participado en el asesinato de una joven estudiante en mayo pasado.
De acuerdo con un informe de la Fiscalía de Justicia del estado de Sonora, en el noroeste de México, Carrillo, de 23 años, fue una de las personas que estranguló, violó y apuñaló 64 veces a Ámbar Dolores, una joven estudiante de Arquitectura que fue calificada como una destacada modelo y deportista de Taekwando.
Después de ser asesinada en una casa de Hermosillo, su cuerpo fue quemado. Según datos obtenidos por el Diario 24 Horas, la causa de la muerte fue la asfixia por estrangulamiento con un elemento constrictor; la otra causa del fallecimiento fue un sangrado masivo, como resultado del apuñalamiento.
Dolores fue una de las cuatro víctimas de feminicidio que se reportaron el 30 de mayo durante una fecha que se conoció como el “jueves negro”.
Los delitos que se le imputan a Carrillo, quien se encuentra en prisión preventiva por seis meses, son cargos por feminicidio, violación agravada y robo con violencia, entre otros. Los otros dos individuos, también con estos cargos, fueron identificados como Édgar Patricio, de 28 años, y Miguel, de 29 años.
El pasado 15 de junio las autoridades mexicanas detuvieron a Carrillo mientras conducía el automóvil de la víctima en Hermosillo con algunas de sus pertenencias como dos identificaciones, llaves, teléfono móvil, entre otros artículos, señaló la Fiscalía de Justicia.
El padre del acusado fue uno de los capos del narcotráfico de finales del siglo XX y era conocido como "el Señor de los Cielos" por tener una extensa flota de aeronaves que usaba para traficar grandes cantidades de droga desde México hacia Estados Unidos.
El detenido también es hijo de Zayda Graciela Navarro Durazo, relacionada con las actividades del Cartel de Juárez y hermana de Carlos Navarro Durazo, extraditado en 2017 a Estados Unidos tras ser detenido por la entonces Procuraduría General de la República (PGR) a finales de 2016 al ser buscado por la DEA, la agencia antinarcóticos estadounidense.
Carrillo Fuentes murió el 4 de julio de 1997 durante el periodo de recuperación de una cirugía para cambiarse el rostro a la que se sometió en un hospital privado de la Ciudad de México.