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ICE bate el récord de detenidos desobedeciendo al Congreso. Y los lleva a los dos peores estados para los migrantes

Así desobedece la Migra las órdenes del Congreso, y despoja a los migrantes de sus posibilidades de defenderse.

El Congreso ordenó el pasado mes de febrero al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) que redujera el número de personas bajo su custodia. Medio año después, esta cifra ha alcanzado su récord, desobedeciendo el mandato legislativo, gracias a la apertura de nuevas prisiones privadas, muchas de ellas en los estados más estrictos contra los migrantes.

ICE mantiene en prisión a 55.220 personas, según reporta la web informativa Mother Jones, pese a que el Congreso le ordenó reducir los detenidos de 49.000 (los que tenía ese mes) a 40.520 antes de final de año fiscal (en octubre).

Este incremento ha sido posible gracias al uso de prisiones gestionadas por empresas privadas con ánimo de lucro. Desde febrero, se han abierto seis en Louisiana y dos en Mississippi, que son usadas para albergar a indocumentados y solicitantes de asilo. En total, hay 13 en estos dos estados.

Concentrar a los migrantes en estos estados sureños les perjudica, en parte porque los jueces de inmigración allí son más proclives a rechazar las solicitudes de asilo, en parte porque, como no hay suficientes jueces, los detenidos deben comparecer ante cortes de otros estados por videoconferencia, quedando sin representación de un abogado que defienda sus intereses.

En 2016, antes de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, el 75% de los inmigrantes arrestados lograba salir en libertad bajo fianza en esta área; dos años después, prácticamente ninguno lo consigue.

Algunas de estas prisiones, además, fueron escenario de abusos y muertes, que tras investigaciones periodísticas llevó a que el ex presidente demócrata Barack Obama limitara al máximo el uso de cárceles privadas.

Las detenciones de indocumentados en los estados sureños se han cuadruplicado además en el último año, según datos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) recabados por la cadena NBC.

El número de arrestados en centros de detención de ICE en Louisiana y Mississippi ha pasado de 2.000 a finales de 2017 a más de 8.000 en julio de 2019.

La mayoría (6.500) se encuentran en Louisiana, que se ha convertido el estado con mayor número de migrantes detenidos por ICE después de Texas.

En Mississippi se produjo el pasado 7 de agosto la macro-redada en siete plantas de procesamiento de carne, en la que fueron detenidas 680 personas; en días posteriores, cientos más perdieron sus empleos en las factorías afectadas.

Hasta ahora se han presentado cargos contra más de 40 personas por esta redada, pero entre ellas no hay ningún responsable de las empresas, según informa el diario USA Today. Y ello pese a que éstos parecían saber que los inmigrantes (algunos de ellos, con grilletes de ICE) eran indocumentados.

La pena máxima para los empleadores es seis meses de cárcel y/o una multa de 3.000 dólares por trabajador indocumentado.

La ley obliga a la Fiscalía a probar que los migrantes fueron contratados a sabiendas de que eran indocumentados, lo que resulta complicado de probar y lleva a que en muchas ocasiones los empresarios no sean procesados.

Entre 2009 y 2016, con el demócrata Barack Obama en la Casa Blanca, se registraron 88 casos contra empresas por violaciones migratorias; desde la toma de posesión de Donald Trump en enero de 2017, se han registrado cinco casos.