IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Guatemala prevé aumento de refugiados con eventual puesta en marcha de acuerdo de "tercer país seguro"

Guatemala se debate entre aceptar un acuerdo de tercer país seguro y recibir a miles de migrantes que Trump rechace o enfrentarse al mandatario del país más poderoso del mundo

DARIEN.— El ministro de Gobernación de Guatemala, Enrique Antonio Degenhart, expresó hoy optimismo de que su país pronto pondrá en marcha el controvertido acuerdo de “tercer país seguro” para comenzar a recibir a miles de solicitantes de asilo rechazados en la frontera sur de EEUU.

En declaraciones a los periodistas, Degenhart dijo que la implementación del acuerdo de “tercer país seguro”, suscrito el pasado 26 de julio, está a la espera de los comentarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y de la decisión final de la Corte de Constitucionalidad, y no anticipa más trabas legales.

“Estamos claros de que el acuerdo de cooperación se basa en la autoridad presidencial… estamos claros en qué camino pensamos que debemos seguir”, pero “necesitamos una clarificación (de la Corte de Constitucionalidad) pronto”, dijo.

El funcionario se refería a que el acuerdo sigue en el congelador porque la Corte de Constitucionalidad (CC) evalúa un recurso de revocatoria del Ejecutivo contra el fallo inicial que dio la corte al indicar que el documento necesita la aprobación del Congreso guatemalteco.

Degenhart hizo esas declaraciones al recorrer junto al secretario interino de Seguridad Nacional de EEUU, Kevin McAleenan, y otros ministros de seguridad del “Triángulo del Norte” a un centro de procesamiento de migrantes en la comunidad darienita de La Peñita, adonde llegan miles de migrantes procedentes de Asia, Africa y Oriente Medio.

Los ministros recibieron información sobre el procesamiento de los migrantes por parte de miembros del Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT), y las necesidades tecnológicas de la entidad para mejorar sus labores. 

 En el marco de la Conferencia de Ministros y Secretarios de Seguridad del Triángulo Norte y Sur de Centroamérica y EEUU, Degenhart y McAleenan firmaron ayer jueves un "memorando de entendimiento" para "mejorar la cooperación para prevenir y combatir la delincuencia y otras amenazas a la seguridad pública”.

Aunque quedan muchos detalles por definir en torno al acuerdo de "tercer país seguro", como el número de personas que Guatemala acogerá, Degenhart expresó su deseo de que el gobierno pueda anunciar la fecha exacta de la implementación del acuerdo.

El acuerdo, que solo aceptaría el regreso de salvadoreños y hondureños a Guatemala, ha sido blanco de críticas de grupos cívicos dentro y fuera de Guatemala, por entender de que ese país carece de la capacidad y recursos para absorber a un gran número de refugiados y solicitantes de asilo.

En ese sentido, Degenhart reconoció que, una vez implementado, EEUU previsiblemente devolvería a ese país a miles de solicitantes de asilo.

No está claro cuánto presupuesto destinaría el gobierno de Guatemala a programas de salud y educación para los migrantes.

El entrante gobierno del presidente electo, Alejandro Giammattei, ha dicho que el acuerdo necesita modificaciones. Giammattei tomará las riendas del gobierno en enero próximo, y McAleenan dijo anoche que la Administración Trump está “abierta al diálogo” con el próximo gobierno guatemalteco.

También la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR) ha dicho que la única forma de que el acuerdo sobre “tercer país seguro” funcione es si se fortalece el sistema de protecciones.

La oficina de ACNUR en Guatemala reanudó operaciones en ese país hace unos años y cuenta con un presupuesto muy limitado.