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Este expolicía se convirtió en ladrón de bancos. Asegura que es culpa de una cirugía cerebral

Con menos de 40 dólares en su cuenta, el exjefe de policía de Carolina del Sur, escribió una nota en el capó de su automóvil. Una vez dentro del banco, en Simpsonville (Carolina del Sur), le entregó el mensaje a un cajero.

Al termino de una juerga de dos dos días en la que quemó cientos de dólares en el club de striptease, Richard Inman, desesperado y en quiebra, observó cómo unos pocos clientes estaban dentro de la sucursal del Banco de América un sábado por la mañana. Con menos de 40 dólares en su cuenta, el exjefe de policía de Carolina del Sur, escribió una nota en el capó de su automóvil. Una vez dentro del banco, en Simpsonville (Carolina del Sur), el 24 de junio de 2017, Inman, un hombre calvo y con perilla, le entregó el mensaje a un cajero.

"Esto es un robo", decía. "Tengo un arma. ¡Nada de paquetes de tinta [dispositivos controlados por control remoto para frustar robos] ¡2.000 en efectivo! Nada de alarmas. No llores, mantén la calma".

Sin problemas, el empleado le entregó un sobre con 20 billetes de 100 dólares. "Que tengas un buen día", le dijo al gerente, según el Post and Courier. Cuando las imágenes de vigilancia del banco se transmitieron por televisión, sus antiguos colegas, encargados de hacer cumplir la ley, quedaron desconcertados al ver a su exjefe robando un banco, en parte porque ni siquiera llevaba una máscara.

Pero a ese acto le seguió un patrón de comportamiento extraño para este veterano con 17 años de experiencia en la policía. Todo había comenzado, dijo Inman al Post and Courier esta semana, después de someterse a una cirugía para extirpar un tumor cerebral en 2009.

"No fue una gran cosa, no estuve investigando y planenándolo", dijo Inman, de 50 años, sobre el robo al banco. "Entré y lo hice como si estuviera pidiendo una pizza", aseguró.

Ahora, Inman, quien se declaró culpable del incidente de 2017, ha estado de vuelta en la cárcel durante unos cinco meses y en espera de juicio después de robar presuntamente un segundo banco de Carolina del Sur el pasado marzo. En un artículo publicado este domingo por The Post and Courier, el exjefe de policía dice que culpa a su tumor cerebral de sus últimos 10 años tumultuosos, en el que el oficial de policía condecorado también renunció a su cargo por publicaciones ofensivas de Facebook y perdió a su familia.

Inamn ha catalogado de "maldición" en su vida a la a la cirugía cerebral que le le practicaron para extirpar un tumor no maligno del lado derecho de su lóbulo frontal, una parte de su cerebro que supervisa el juicio y el control de los impulsos

"Me operaron, y es como si las ruedas se salieran. Cada decisión que tomé desde entonces fue mala. Y tuvo un impacto en mí, en mi vida familiar y en mi carrera ",  afirmó Inman al periódico.

El cambio de Inman de jefe de policía a ladrón de bancos podría ser el último y más extraño caso de cómo una lesión o cirugía en el cerebro puede alterar drásticamente la personalidad de un individuo. La historia de tales cambios de personalidad se remonta a Phineas Gage, el trabajador ferroviario del siglo XIX que pasó de ser astuto e inteligente a agresivo e impulsivo después de un incidente en el que una varilla de hierro atravesó la parte frontal de su cerebro, según la BBC.

Después de trabajar en varias agencias en Carolina del Sur a partir de 1994, la contratación de Inman como jefe del Departamento de Policía de Williamston en julio de 2009 recibió elogios en la ciudad de alrededor de 4.200 personas. Su objetivo, dijo en su anuncio de contratación, era ver a todos los ciudadanos tratados con "justicia y respeto", según el Anderson Independent-Mail. Su título de historia del Presbyterian College y sus fuertes recomendaciones impresionaron a los residentes, y sus programas centrados en la vigilancia del vecindario y la eliminación de los traficantes de drogas en el área fueron éxitos instantáneos, informó el New York Times.

"Fue tras los traficantes de drogas y estaba limpiando la zona", dijo a WYFF Carthel Crout, un exalcalde de Williamston. Phyllis Lollis, entonces administradora de la ciudad, se hizo eco del sentimiento. "Él cambió las cosas por aquí", dijo al Post and Courier.

Tras solo un mes en el trabajo, Inman sufrió una convulsión. Los médicos descubrieron que el jefe de policía tenía un meningioma, un tipo común de tumor cerebral, que había estado creciendo en el lado derecho de su lóbulo frontal durante una década. No era maligno, pero el tumor del tamaño de una pelota de softball necesitaba ser extirpado.

Milagrosamente, Inman regresó al trabajo semanas después de la cirugía. Pero algo estaba mal en Inman, quien calificó el período como "una especie de niebla". Cálido, afable y agudo, el jefe ahora era frío, distante y lento. Las bromas respetuosas y divertidas fueron reemplazadas por comentarios burdos a sus colegas.

"Cuando regresó, era totalmente diferente", dijo Lollis al Times, "y sabíamos que estaba tomando muchos medicamentos". Crout le dijo a WYFF que Inman nunca fue el mismo después de la cirugía. Los colegas le dijeron al Post and Courier que perdió el control de los impulsos en su conversación diaria, casi como si le faltara un filtro.

En agosto de 2011, Inman, renunció al departamento de policía después de compartir bromas ofensivas sobre mexicanos y afroamericanos en su página personal de Facebook. Inman declaró al Washington Post que pensaba que las publicaciones eran divertidas y que no reflejaban su enfoque de vigilancia. Entonces llamó a su esposa para compartir la noticia de su renuncia. Días después, ella lo dejó.

Alcoholismo y depresión

Durante los años siguientes, Inman luchó contra el alcoholismo y la depresión antes de ir a rehabilitación. Mientras conducía el 22 de junio de 2017 para encontrarse con sus hijos en Greenville, Carolina del Sur, Inman, que entonces estaba sobrio y había encontrado trabajo en una ferretería, se detuvo en un motel y se dirigió al Trophy Room, un club de striptease donde recayó y gastó casi 763 dólares en bebida durante dos días, según el Post and Courier.

"Es casi como si pudiera bloquear las consecuencias de mi mente y decir:" Bueno, si esto no funciona, no pasa nada. Todo en lo que podía pensar era en lo enojada que estaría mi madre si tuviera que llamarla y pedirle dinero para el combustible. Qué molesta estaría ella por haber gastado todo mi sueldo", explicó. Las imágenes del robo de Simpsonville llevaron a sus amigos a enviarle un mensaje en Facebook e Inman admitió que lo hizo.

Crout, el exalcalde, vio el incidente como algo más que un presunto robo. "Odio ver que esto le suceda a un buen hombre, pero también creo que esto podría ser un grito de ayuda", dijo Crout, según WYFF. "¿Por qué un hombre en su ciudad natal de Fountain Inn y Simpsonville robaría un banco a plena luz del día sin disfrazarse, sin nada?", se preguntó.

Inman se declaró culpable en 2018 y fue sentenciado a cuatro años de libertad condicional. Pero solo un año después, el 22 de marzo, Inman entró en otra sucursal del Bank of America, esta vez en Pawleys Island (Carolina del Sur). Una vez más, presuntamente deslizó una nota a un cajero del banco y afirmó estar armado, informó Independent-Mail. Con otro sobre de dinero, Inman fue perseguido por la Oficina del Sheriff del Condado de Georgetown y finalmente fue baleado por la policía, sufriendo heridas que no pusieron en peligro su vida. Luego confesó.

El caso contra Inman en el segundo presunto robo aún está pendiente. Hoy en día, su madre, Carol, lo mantiene informado sobre sus hijos, de los que solo uno mantiene contacto con él y le apoya como puede. "La vida de Richard está arruinada", declaró al periódico.

Inman, que todavía tiene dificultades para explicar sus motivos para cometer robos, piensa en el alivio que sintió después de que un médico le dijera en 2009 que iba a estar bien después de la cirugía cerebral. Había una sensación de esperanza de que la vida volvería a la normalidad una vez que se extrajera el tumor. "No tanto, ahora", le dijo al Post and Courier

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