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Muere un boxeador tras ser golpeado en un combate salvaje por su rival latino

“Voy a pararlo”, le gritó su entrenador, “te están pegando demasiado”. Pero ya era demasiado tarde.
Maxim Dadashev (a la izquierda) golpea a Antonio DeMarco en una imagen de archivo de un combate en 2018 en Las Vegas.
Maxim Dadashev (a la izquierda) golpea a Antonio DeMarco en una imagen de archivo de un combate en 2018 en Las Vegas. AP / AP

El boxeador ruso Maxim Dadashev, de 28 años, ha muerto este martes por las heridas sufridas en un combate el viernes contra el puertorriqueño Subriel Matías en Oxon Hill (Maryland).

Dadashev se derrumbó tras ser derrotado por Matías en un combate junior de peso welter (140 libras) para decidir quién se enfrentaría por el título contra Josh Taylor.

Fue intervenido quirúrgicamente un día después para reducir la hinchazón en su cerebro, y le fue inducido un coma del que no se ha recuperado, según ha informado su entrenador, James McGirt.

“Esto te hace darte cuenta del tipo de deporte en el que estamos”, explicó McGirt a la cadena ESPN, “él lo hizo todo bien durante el entrenamiento, sin problemas, nada. Mi mente está ahora corriendo a loco, pensando en qué podría haber hecho de otra forma, pero al final todo fue bien [en el entrenamiento]”.

“Parecía bien, parecía listo, pero éste es el deporte en el que estamos, sólo hace falta un puñetazo”, añadió.

Dadashev recibió varios puñetazos durante el combate en la cabeza y el resto del cuerpo, hasta que su entrenador detuvo la pelea en el undécimo asalto.

“Voy a pararlo, Max”, le gritó, “te están pegando demasiado”. El boxeador negó con la cabeza, pero su entrenador le suplicó: “Por favor, Max, por favor, déjame hacerlo, ¿vale, vale? Mírame, por favor”.

Dadashev volvió a negar con la cabeza, y McGirt añadió: “Si no, lo hará el árbitro, vamos, Max, por favor”. El boxeador no respondió y su entrenador terminó el combate y llamó al doctor para que atendiera al joven.

McGirt explicó después que había pensando en arrojar la toalla ya en el noveno asalto, pero en el undécimo ya no pudo continuar: “Le vi eclipsarse, y cuando volvió a la esquina ya había tomado la decisión”, “sólo le pregunté por respeto, pero había tomado la decisión, no iba a dejarle salir”.

Tras salir del cuadrilátero, con ayuda, se derrumbó antes de llegar al vestuario y comenzó a vomitar. Fue hospitalizado y sometido a cirugía durante dos horas para reducir el hematoma cerebral causado por la sangre.

Dadashev nacido en San Petersburgo (Rusia), pero se había criado en Oxnard (California). Estaba casado y tenía un hijo.