El presidente, Donald Trump, ha anunciado este viernes en Osaka (Japón), donde se celebra la cumbre del G20, que permitirá a las empresas estadounidenses vender sus propios productos a la compañía tecnológica china Huawei.
Poco antes, Trump mantuvo una reunión con el presidente chino Xi Jinping, en la que acordaron retomar las negociaciones comerciales entre los dos países interrumpidas en los últimos meses por tensiones de tipo político y económico.
El mes pasado, Trump declaró una emergencia nacional para prohibir a las compañías estadounidenses hacer negocios con empresas que supuestamente intentan espiar a los ciudadanos de EEUU, y por lo tanto, representarían una amenaza a la seguridad nacional.
En un principio, la orden ejecutiva emitida para poner en práctica esta decisión establecía un plazo de cinco meses para que el secretario de Comercio de EEUU, Wilbur Ross, determinara qué compañías debían estar sujetas a las nuevas limitaciones.
Sin embargo, en una decisión posterior, el Departamento de Comercio incluyó a Huawei en una lista negra de compañías y personas a las que se vetaba el acceso a tecnología estadounidense.
En respuesta a ello, algunas compañías de EEUU, como Google, decidieron dejar de vender componentes software y hardware a este gigante tecnológico chino.
El riesgo principal para los consumidores de Huawei era que productos como celulares o tabletas de esta empresa pudieran quedarse obsoletos si ya no hubieran podido acceder a servicios y actualizaciones como los que ofrece Google. Pero ahora parece que podrán quedarse más tranquilos.
"Hemos acordado que las empresas estadounidenses puedan vender productos a Huawei", afirmó Trump en una conferencia de prensa. "Vendemos a Huawei una tremenda cantidad de productos. Yo dije que eso está bien. Es un tema complejo, por cierto", agregó el presidente.
Por el otro lado, el gobernante no quiso precisar si como parte de esa revisión en el caso del fabricante chino la compañía será sacada de la lista negra donde están incluidas las empresas vetadas. Según NBC News, esto supone que las compañías estadounidenses podrían seguir sin poder comprar tecnología de Huawei.
"No hemos hablado de eso. Tendremos una reunión mañana o el martes", dijo Trump. Y cuando se le volvió a insistir sobre este tema, recalcó que no quería hablar de ello. "Creo que es inapropiado. Lo dejamos para después", dijo
Huawei ha conseguido situarse a la cabeza del despliegue de infraestructuras de la nueva tecnología 5G, un tipo de red móvil que permite conexiones por Internet mucho más rápidas de las actuales, y se prevé que permita impulsar el desarrollo de sistemas como los vehículos autónomos.
Estados Unidos ve con preocupación que esta u otras empresas chinas se hagan con el control del 5G, porque teme que el Gobierno chino aproveche esas tecnologías desarrollados por empresas del país para el espionaje. Huawei niega que sea así.
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