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Demócratas lanzan primer anuncio electoral en español y condenan el silencio de republicanos sobre maltrato de niños migrantes

Faltan 17 meses para los comicios generales en EEUU, pero el Comité Demócrata de Campañas del Congreso (DCCC) ya inició una extensa campaña publicitaria contra los republicanos.

WASHINGTON.— Convencido de que las elecciones de 2020 serán un referendo sobre el presidente Donald Trump y sus aliados republicanos, el Comité Demócrata para Campañas del Congreso (DCCC, en inglés) lanzó hoy su primer anuncio electoral en español para condenar el silencio de los republicanos sobre el maltrato de niños migrantes.

El anuncio, adelantado a Noticias Telemundo, es apenas el primero de una serie que el DCCC difundirá en Facebook e Instagram, con la meta de movilizar y afianzar también el voto hispano en estados clave de la contienda presidencial.

Se trata de una extensa campaña publicitaria de la maquinaria demócrata contra legisladores republicanos que han apoyado, de forma activa o con su silencio, las medidas de la Administración Trump contra los inmigrantes indocumentados, explicó el DCCC.

En este caso, el anuncio va contra contra William Hurd, el único legislador republicano del distrito 23 de Texas, ubicado en una zona fronteriza al oeste del estado con alta concentración de hispanos.

El distrito, donde los hispanos son casi el 71% de su población, registró una de las contiendas más reñidas en los comicios generales de 2016.

No es coincidencia que el DCCC escogió Texas para su primer salvo, tomando en cuenta que el estado ha registrado grandes cambios demográficos -con un gran potencial para los demócratas-, y los hispanos están alterando su mapa político.

El anuncio en cuestión ataca la inacción de Hurd a la hora de denunciar abusos contra los inmigrantes, como ocurrió con niños que permanecieron metidos en camionetas en el centro de detención de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) en Port Isabel, en julio del año pasado.

A principios de mes, un informe de NBC News reveló cómo las autoridades de inmigración dejaron a 37 niños indocumentados, todos entre 5 y 12 años de edad, en camionetas bajo un calor extremo.

Los menores aguardaban ser procesados y reunificados con sus padres -al igual que niños que procedían de otros albergues del gobierno-, pero en vez de un feliz reencuentro éstos pasaron metidos en las camionetas durante al menos 23 horas.

El último niño fue procesado 39 horas después de arribar al centro de detenciones, es decir, pasó 39 horas en una camioneta.

El anuncio del DCCC muestra una gráfica de niños acurrucados o acostados en un piso, y destaca la pregunta de “¿Por qué el congresista Hurd no ha denunciado esta urgente crisis humanitaria?”.

“Si no lo puede hacer, no merece nuestro voto”, añade el anuncio del DCCC.

Roger Garza, un asesor de alto rango del DCCC en Texas, explicó que, a su juicio, “los texanos están indignados por la política cruel e inhumana de la Administración Trump de separar a los niños de sus familias”, y los líderes políticos tienen la “responsabilidad moral de denunciar las injusticias en sus comunidades”.

Hurd, un exagente encubierto de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), nunca ha ocultado su apoyo a medidas contra la población indocumentada.

La semana pasada, Hurd condenó que los demócratas en la Cámara de Representantes hayan bloqueado una enmienda suya dotada de $30 millones para reembolsar a las comunidades y organizaciones sin fines de lucro afectadas por la crisis en la frontera sur.

Hurd había propuesto la enmienda dentro del proyecto de ley de $4.500 millones en gastos suplementarios para la vigilancia fronteriza, que aún debe ser sometido a voto en el pleno de la Cámara Baja.

El Partido Republicano también hace lo propio por ampliar su base y conquistar el voto hispano.

El grupo "Engage Texas", compuesto por donantes republicanos multimillonarios, preparan una campaña para inscribir a más de un millón de votantes en el estado, que hasta ahora ha estado bajo dominio conservador. 

Anoche, líderes del Club Republicano de Hialeah trasladaron dos autobuses repletos de votantes hispanos republicanos desde Miami a la ciudad de Orlando para presenciar el lanzamiento formal de la campaña de reelección del presidente Donald Trump.

A juzgar por los planes electorales de ambos partidos para movilizar votantes y voluntarios en todo el país, los comicios generales de 2020 se perfilan como entre los más costoso y más reñidos de la historia reciente.

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