Un bebé de 4 meses, Constantin Mutu, de origen rumano, es el niño migrante más pequeño identificado hasta ahora entre los cerca de .,000 menores víctimas de la separación de familias, consecuencia de la política de "tolerancia cero" del Gobierno de Donald Trump, según una investigación del diario The New York Times.
Un episodio en "The Weekly", la nueva serie de televisión producida por el NYT, aborda las vicisitudes que atravesó el bebé, enviado cinco meses a un hogar de acogida lejos de sus padres, que habían viajado a México desde Rumanía con dos de sus cinco hijos, Constantin y un niño de 4 años, para pedir asilo en EE.UU. en 2018.
Poco antes de llegar a la frontera de Texas la pareja se perdió. El padre, Vasile, cruzó con Constantin e inmediatamente los separaron. La madre, Florentina, y el otro hijo no llegaron a cruzar. Volvieron a Rumanía poco después.
De acuerdo a la historia que adelanta el diario, el padre de Constantin tiene antecedentes criminales y aseguró haber recibido "presiones para retirar la petición de asilo". Este no hablaba ni leía inglés. Mutu le ha contado al Times que los agentes le dijeron que si retiraba la demanda de asilo sería deportado de vuelta con su bebé. Este firmó y salió del centro de detención el 3 de junio de 2018 pero volvió a Rumanía solo.
Mientras, las autoridades colocaron a Constantin, que tenía solo 4 meses de edad, en una familia de acogida en el estado de Michigan, al noreste de Estados Unidos. Volvió a ver a sus padres con 10 meses tras pasar más de la mitad de su vida bajo custodia de las autoridades migratorias de EEUU.
"Cuando el presidente Trump se rindió a la presión y firmó una orden ejecutiva que paralizaba las separaciones, un juez dio paso a una demanda que pretendía reunir a las familias y preparó el camino de vuelta a Rumanía para Constantin", señala el rotativo, que visitó al pequeño en el hogar de acogida y a sus padres en Rumania. Constantin tiene ahora un año y medio.
La política de “tolerancia cero” del presidente Donald Trump es una medida que buscaba procesar por la vía penal a todos los migrantes que cruzasen ilegalmente la frontera de Estados Unidos con México. Como los menores de edad no pueden estar detenidos en las mismas condiciones que los adultos más de 21 días, los niños fueron separados de sus familias mientras los padres esperaban juicio en la cárcel.
El Times reveló el año pasado que las autoridades estaban separando a los menores de sus familias en la frontera, acusó a las autoridades de no cuantificar el problema, y después calculó que en octubre había más de 700 niños migrantes separados de adultos que los reclamaban como sus hijos.
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