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Abren centro de detención en Texas que cerró por brote de gripe tras muerte de un menor migrante

Las autoridades identificaron 32 casos de influenza en el centro.

La Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza reabrió su principal centro de procesamiento este miércoles en McAllen, Texas que fue cerrado temporalmente tras identificar 32 casos de influenza.

Este movimiento se produce después de la muerte de un menor migrante de 16 años al que se le había diagnosticado gripe en las instalaciones. Se trata del quinto menor migrante, todos ellos guatemaltecos, fallecido bajo custodia del Gobierno desde el pasado diciembre.   

“La Patrulla Fronteriza actuó rápidamente para mitigar la propagación de cualquier enfermedad”, indicó un portavoz de la CBP (por sus siglas en inglés) en un comunicado. La agencia indicó que el lugar fue esterilizado, se realizaron evaluaciones médicas de todas las personas y que además ofrecieron tratamiento médico.

Anteriormente, la CBP había indicado al diario Washington Post que “las personas detenidas en el sector del Valle de Río Grande (RGV) habrían sido llevadas a otros lugares hasta que se resolvía la situación". 

El centro de procesamiento de McAllen, un edificio abarrotado, similar a un almacén, donde se detiene a los migrantes detrás de las cercas y duermen sobre colchonetas, es una de las instalaciones de detención más concurridas a lo largo de la frontera sur.  

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La CBP anunció el lunes que un joven guatemalteco de 16 años murió tras seis días detenido en la instalación, dos veces más de lo permitido generalmente por la ley estadounidense. Tras ser diagnosticado con gripe el pasado domingo, Carlos Hernández Vásquez fue trasladado a una comisaría más pequeña de la Patrulla Fronteriza, donde fue encontrado sin vida el lunes. 

El pasado 16 de mayo otro menor guatemalteco de dos años y medio falleció por una aparente neumonía en un hospital en el que estaba ingresado desde que cruzó la frontera con su madre a principios de abril. El niño fue detenido junto a su madre tras cruzar de forma irregular el linde desde México, cerca de El Paso (Texas), el pasado 3 de abril. 

Otro menor de la misma nacionalidad, Juan de León Gutiérrez, de 16 años, falleció de una infección en el cerebro tras haber sido detenido el 19 del mes pasado tras cruzar solo la frontera cerca de El Paso y ser trasladado a un albergue para niños y adolescentes. 

En diciembre perdieron la vida Jakelin Caal Maquin, de 7 años, y Felipe Gómez Alonzo, de 8, en dos casos muy polémicos.

ACALORADA SESIÓN EN EL CONGRESO

Al mismo tiempo, una legisladora demócrata responsabilizó el mismo miércoles a la Administración Trump por la muerte de los cinco niños inmigrantes bajo custodia federal, una afirmación que desató una acalorada discusión en una audiencia del Congreso.

Los republicanos en una audiencia de la Comisión de Seguridad Nacional criticaron el comentario de la representante Lauren Underwood, de Illinois, quien dijo al secretario en funciones del Departamento de Seguridad Nacional Kevin McAleenan que “a esta altura, con cinco niños muertos y miles separados, es una decisión política hecha por esta administración y es inhumana”.

McAleenan, nombrado tras la renuncia de la secretaria de Seguridad Nacional Kirstjen Nielsen, dijo que la acusación es horrible

En la misma audiencia, McAleenan dijo que se necesitaba más dinero para lidiar con la crisis de inmigración, y que las enormes cantidades de familias migrantes centroamericanas que entraban a Estados Unidos agotaban los recursos. En los últimos tres meses los cruces de frontera han superado los 100.000 mensuales, el mayor nivel en 12 años. Las familias que cruzan tienen necesidades especiales y no pueden ser enviadas fácilmente de regreso al otro lado de la frontera.

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