WASHINGTON— En el marco de la continua presión de EEUU por un cambio de régimen en Venezuela, el vicepresidente Mike Pence anunció hoy el levantamiento de sanciones contra un líder militar que se alzó contra Nicolás Maduro, y el envío de un busque hospital de la Marina en una misión humanitaria a la región el mes próximo.
Pence dijo que Estados Unidos está levantando “con efecto inmediato” sanciones impuestas al general Manuel Cristopher Figuera que, según la Administración Trump, rompió con Maduro y dejó su cargo como director del Servicio de Inteligencia (Sebin) de Venezuela.
También instó a los 25 jueces del Tribunal Supremo de Venezuela a que retornen a su función constitucional y no se presten a servir como "herramienta política" de Maduro, o de lo contrario EEUU les exigirá "rendición de cuentas".
Pence hizo el anuncio favorable a Figuera durante la 49 Conferencia anual de las Américas en la sede del Departamento de Estado, donde la crisis política y económica en Venezuela fue el plato fuerte del encuentro regional.
El objetivo de EEUU es proveer alicientes para que otros líderes de la cúpula castrense en Venezuela abandonen a Maduro y faciliten la transición a la democracia en ese país.
La semana pasada, el presidente interino, Juan Guaidó, lideró un fallido esfuerzo por alentar una rebelión cívica y militar contra Maduro, pero Pence reiteró hoy el compromiso de EEUU con el pueblo venezolano y contra países como Rusia, Irán y Cuba que respaldan al régimen de Caracas.
Pence citó ejemplos de la hambruna que sufren niños, la profunda crisis económica de Venezuela, y el éxodo de tres millones de personas hacia países vecinos.
En ese sentido, Pence aseguró que la principal fuente de inestabilidad en el continente proviene precisamente del régimen de Maduro, que mantiene un “esfuerzo desesperado por aferrarse al poder”.
Salpicando su discurso con algunas frases en español en apoyo a la libertad en Venezuela, Pence acusó a Cuba de tomar como “rehenes” al pueblo venezolano.
Por otra parte, Pence repitió que EEUU mantiene “todas las opciones sobre la mesa”, y el mes próximo estará desplegando al buque hospital de la Marina, el "USNS Comfort" en el Caribe, Centro y Sudamérica para una misión humanitaria que durará cinco meses.
La Armada emitió un comunicado que confirma esa misión, pero no precisa los países incluidos.
¿Ayuda o acto de provocación?
Sin embargo, el analista político y presidente del Diálogo Interamericano, Michael Shifter, dijo a Noticias Telemundo que lo más probable es que Maduro interprete el envío del buque hospital como un “acto de provocación”, e “intentará sacarle ventaja política, atizando un sentimiento nacionalista”.
“Además, esta movida podría incomodar a los socios de EEUU en América Latina y Europa que trabajan en torno a la crisis en Venezuela. Esto lo podrían interpretar como un preludio a una intervención militar que todos rechazan”, puntualizó.
Horas antes, el presidente electo de El Salvador, Nayib Bukele, se hizo eco de otros mandatarios en la región que abogan por una solución diplomática y mayores sanciones individuales, y se oponen a una intervención militar en Venezuela.
Por otra parte, Shifter puso en duda que el levantamiento de sanciones contra Figuera altere la situación actual en Venezuela y aliente a otros militares a pasarse al bando de Guaidó.
Es que, según el analista, el levantamiento de sanciones no responde al asunto fundamental que preocupa a los generales, que desean amnistía para sus crímenes.