WASHINGTON— La Administración Trump solicitó hoy al Congreso un paquete de poco más de $4.500 millones en fondos adicionales para atender la “inmediata crisis humanitaria” en la frontera, la mayoría de los cuales será destinada a proveer ayuda básica a los migrantes y niños no acompañados bajo custodia federal.
Durante una conferencia telefónica con periodistas, un funcionario de alto rango de la Administración explicó que el dinero no será utilizado para la construcción del muro fronterizo que prometió el presidente Donald Trump durante la contienda de 2016 y que ha sido un punto de conflicto entre demócratas y republicanos.
La idea es dar una respuesta a la crisis “de forma segura y humana” porque la situación en la frontera se vuelve cada día “más extrema”, acotó el funcionario, al advertir de que el número de detenciones en la zona podría superar el millón este año.
En lo que va del año, por ejemplo, más del 50% de las detenciones ha sido de unidades familiares.
El anuncio del paquete de fondos adicionales, que debe ser aprobado por el Congreso, se produjo un día después de que el secretario de Seguridad Nacional interino, Kevin McAleenan, adelantara durante una audiencia ante el Legislativo la solicitud presupuestaria.
McAleenan advirtió de que, ante la dimensión de la crisis por el creciente flujo de cruces ilegales en la frontera, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) agotaría sus fondos “antes de que termine el año fiscal” el próximo 30 de septiembre.
Según un desglosado de la solicitud de fondos, colgado en la página web de la Oficina de Gestión y Presupuesto de la Casa Blanca (OMB, por su sigla en inglés), las autoridades destinarán $3.300 millones para la distribución de comida, ropa, pañales, y otras necesidades básicas de menores de edad, para servicios de transporte y para ampliar los espacios en los albergues para niños no acompañados.
En la actualidad, los centros de detención de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) tienen capacidad para un promedio de 50.000 detenidos a diario, y los fondos para aumentar el número de camas con seguridad desatará críticas de grupos pro-inmigrantes.
Del total de fondos, $1.100 millones se utilizarán para operaciones de vigilancia, más camas en los centros en detención y para fortalecer las investigaciones relacionadas con el tráfico de personas.
Otros $178 millones se usarán para la contratación de más agentes fronterizos y otros recursos, incluyendo $10 millones para mejorar el procesamiento de los inmigrantes.
A comienzos de año, ante la oposición demócrata en el Congreso para la construcción del muro fronterizo, Trump declaró una “emergencia nacional” para así poder desviar fondos del Pentágono para ese megaproyecto y para fortalecer la seguridad fronteriza.
El anuncio sobre los fondos suplementarios también se llevó a cabo mientras el DHS prepara el lanzamiento la próxima semana de un programa piloto para realizar pruebas de ADN para combatir el tráfico de personas en la franja fronteriza.
En declaraciones a Noticias Telemundo, la hermana Norma Pimental, directora ejecutiva de Catholic Charities para el Valle del Rio Grande, dijo que su centro ha visto “grandes números” de familias migrantes, que además afrontan “enormes carencias”.
“Hace falta mucha ayuda para no perder ese aspecto humanitario, ese aspecto de que es un ser humano que está aquí en nuestro país y necesita ayuda”, afirmó Pimentel.
La hermana Norma Pimentel, de Catholic Charities, destacó que los migrantes en la frontera vienen a EEUU en busca de ayuda. @TelemundoNews @CCharitiesUSA pic.twitter.com/gwLUiS2AJu
— María Peña (@mariauxpen) May 1, 2019