Mucaad Ibrahim, de tres años, estaba sentado el pasado viernes en una mezquita en Christchurch (Nueva Zelanda) junto a su hermano mayor y su padre, cuando irrumpió un hombre armado y abrió fuego contra los fieles. Se trata de la víctima más joven del total de 50 muertos. La policía ha confirmado este lunes que el atentado contra dos mezquitas fue perpetrado por una sola persona, el australiano Brendon Tarrant.
En medio del caos que siguió a los disparos, el pequeño se perdió y se separó de su familia. El domingo, su hermano Abdi Ibrahim dijo que la policía confirmó lo peor: el pequeño estaba muerte. Una pérdida que ha golpeado con especial ferocidad.
“Era querido por esta comunidad”, dijo Ahmed Osman, un amigo cercano de la familia. “Han sido días realmente muy difíciles”. Mucaad era un niño alegre y enérgico, que siempre parecía estar riendo, dijo su hermano Abdi. La inteligencia del pequeño impresionaba a Osman. Mucaad parecía disfrutar hablando con gente mayor, asegura. “Era muy accesible”, dice Osman. “Era de conversación fácil”.
Casi todos los viernes por la tarde, el pequeño iba a un parque cercano a la mezquita donde le arrebataron la vida. Ahí, veía a Abdi jugar al futbol con Osman y sus amigos. El niño se paraba en la banda para animarlos y pateaba solo el balón en el césped, recuerda con una sonrisa Osman.
Según las autoridades por ahora hay 50 heridos, de los cuales una treintena se encuentra hospitalizada, incluidos diez en estado crítico.
El jefe de la Policía de Nueva Zelanda, Mike Bush, informa de que la alerta de seguridad se mantiene en el nivel "alto", al que fue elevado tras el atentado supremacista, y aseguró que se mantendrá la presencia policial en todo el país para que sus habitantes se sientan seguros y protegidos.
Al comienzo de la jornada la policía antiterrorista de Australia registró dos viviendas en la costa este del país que pertenecen a la hermana de Tarrant y al compañero sentimental de la madre de este exentrenador físico de 28 años.
Tarrant fue imputado el sábado por el juez con un cargo de asesinato y permanecerá en prisión provisional hasta que comparezca ante el Tribunal Superior el próximo 5 de abril.