Los medios estatales rusos han informado que el presidente, Vladimir Putin, planea equipar una flotilla única de submarinos nucleares con el arma más destructiva que tiene esta potencia en su arsenal, el llamado torpedo del Apocalipsis.
El misil ruso Poseidón, presentado por primera vez en 2015, es un dron submarino de última generación apodado “el torpedo del tsunami apocalíptico” que los rusos consideran imposible de detener. Tiene una cabeza nuclear de 100 megatones y avanza a 125 millas por hora.
La agencia rusa de noticias TASS, dijo que los nuevos submarinos Belgorod serían los primeros en la historia en cargar esta arma. Se espera que estén listos para el combate en el año 2020. Cada submarino podría llevar un total de seis ojivas Poseidón.
Por su capacidad destructiva ha sido clasificado como un arma imparable de venganza, pensada para usarse en una tercera ola de ataques nucleares, reporta la revista estadounidense Business Insider. Su modo de operación es submarino e incluso está diseñada para explotar debajo del agua, creando una ola expansiva de radiación capaz de contaminar las costas de todo un continente.
Seis detonaciones de estas bombas podrían acabar con la vida en el planeta como se la conoce.
Los medios estatales rusos han amenazado recientemente con la posibilidad de un ataque nuclear a ciudades estadounidenses en el caso de un conflicto armado.
Anteriormente, Estados Unidos y Rusia se retiraron del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio, firmado en 1987 y que prohibía desarrollar misiles lanzados desde tierra con un alcance de 310 a 3.420 millas.