El gobierno de los Estados Unidos informó hoy que ha ampliado un programa que requiere que los solicitantes de asilo esperen en México mientras sus casos se tramitan en un tribunal de inmigración. También informaron que 240 migrantes que buscan asilo han sido devueltos a México bajo el programa.
Funcionarios de Seguridad Nacional dijeron que el programa también se ha puesto en marcha en el puerto de entrada de Calexico, a unas 120 millas al este del puerto de San Ysidro en San Diego, donde comenzó a fines de enero.
El programa de la administración de Trump es un cambio importante en la manera en que los Estados Unidos manejan los casos de inmigrantes que buscan asilo y huyen de la persecución en su país de origen. Dicho programa se implementa en momentos en que los arrestos fronterizos se han disparado, en febrero llegaron a un máximo que no se había visto en 12 años, y cuando más de la mitad de los detenidos han llegado como familias, muchos de ellos solicitantes de asilo que generalmente se rinden en lugar de tratar de eludir la captura.
En respuesta al anuncio del martes, los departamentos de Relaciones Exteriores e Interior de México dijeron en una declaración conjunta que México no está de acuerdo con lo que llama un cambio de política unilateral en los Estados Unidos. El comunicado dice que México ha trabajado con funcionarios de Estados Unidos por "razones humanitarias" y que un número significativo de los que regresaron tienen permiso para permanecer en México.
En el pasado, las familias solicitantes de asilo han sido liberadas de la custodia de los Estados Unidos y se les ha permitido establecerse con familiares o amigos mientras sus casos pasan por tribunales de inmigración, lo que a menudo lleva años. Los críticos, incluido el presidente Donald Trump, han dicho que liberarlos equivale al método de "captura y liberación", que los funcionarios de la administración quieren limitar con el nuevo programa. El programa también está destinado a disuadir a aquellos que hacen afirmaciones falsas; el número de casos de asilo se ha disparado y ahora hay una acumulación de casi 700.000 casos judiciales de inmigración.
El mes pasado se presentó una demanda contra el programa en California, aunque un juez federal aún no ha decidido si detener el programa mientras avanza el caso legal.
Según los memorandos obtenidos la semana pasada por The Associated Press, los funcionarios mexicanos insisten en que no más de 20 solicitantes de asilo deben ser devueltos cada día desde San Diego a Tijuana, México, de lunes a sábado, lo que subraya los desafíos que Estados Unidos enfrenta al intentar acelerar la aplicación de la ley en la frontera. Los funcionarios estadounidenses deben verificar si los solicitantes de asilo tienen condenas por delitos graves y notificar a México al menos 12 horas antes de que sean devueltos.
Aquellos que cruzan ilegalmente deben haber llegado a EEUU como adultos solteros, aunque la administración está en conversaciones con el gobierno mexicano para incluir a las familias.