perla canales, nacida en honduras, ha estado viviendo y trabajando en eeuu durante 26 años bajo un programa federal que protege temporalmente su estatus migratorio, pero le preocupa cuánto durará.
canales, de 54 años, quien trabaja como empleada de limpieza en un centro comercial en staten island, nueva york, estuvo entre los miles que viajaron a washington el martes para pedir al congreso que promulgue protecciones permanentes para aquellos beneficiados por el programa tps.
aproximadamente 325,000 personas tienen un estatus de protección temporal, que se otorga a inmigrantes de ciertos países que huyen de desastres naturales y guerras civiles y les permite vivir y trabajar en estados unidos.
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aunque las administraciones anteriores siempre han renovado las protecciones de tps, el gobierno de trump ha intentado terminar el programa para la mayoría de sus beneficiarios, incluidos 200,000 salvadoreños, casi 3,000 nicaragüenses, 57,000 hondureños, 46,000 haitianos y casi 10,000 ciudadanos de nepal y sudán.
dos demócratas de la cámara de representantes, alexandria ocasio-cortez de nueva york y ayanna pressley de massachusetts, se unieron a la multitud de manifestantes el martes frente a la casa blanca.
"desde nepal hasta honduras, hicimos la promesa de que íbamos a ser un refugio seguro", dijo ocasio-cortez. "necesitamos asegurarnos de que, como nación, honramos nuestras promesas".
"tps es una falsedad", dijo pressley. “¿qué es temporal sobre las familias que han estado contribuyendo a este país durante décadas? ... estamos aquí afirmando su dignidad y exigiendo que esta administración vea su humanidad ".
aunque los tribunales han impedido temporalmente que el gobierno de trump finalice el tps para algunos beneficiarios, su lucha por una solución permanente que les permita disfrutar de las vidas que han construido en eeuu sin temor a la deportación ha adquirido un nuevo sentido de urgencia.
"no somos una carga para este país", dijo canales a nbc news. "llevo mucho tiempo contribuyendo porque este es mi país".
la administración de trump ha dicho que el tps debería terminar porque las condiciones en los países cubiertos por el programa han mejorado lo suficiente como para que sus residentes regresen allí, y el status de protección solo debía ser temporal.
los partidarios de tps no están de acuerdo. dicen que las familias afectadas podrían correr el riesgo de ser deportadas a países como haití, honduras, el salvador y nicaragua, que aún tienen altos niveles de violencia, pobreza e inestabilidad política.
el gobierno nicaragüense está presionando para implementar recortes en las pensiones y aumentos de impuestos que podrían sumir al país en una recesión, mientras que aproximadamente una de cada cinco personas en honduras vive en la pobreza extrema, según el banco mundial.
el clima político hostil de honduras ha empeorado cada vez más desde noviembre de 2017 debido a las acusaciones de fraude electoral que llevaron a protestas con un saldo mortal en todo el país. miles de personas en haití también han tomado las calles, enojadas por la creciente inflación y la mala gestión económica.
jeremy robbins, director ejecutivo de new american economy, un grupo bipartidista dedicado a la reforma migratoria, dijo que la pérdida de cientos de miles de beneficiarios de tps tendría un efecto perjudicial en la economía de los estados unidos.
"después del huracán harvey en houston, vimos que tuvieron un gran impacto en la reconstrucción porque los beneficiarios del tps dieron un paso adelante cuando se necesitaban trabajadores de la construcción", dijo robbins.
según el grupo de robbins, el 96 por ciento de los titulares de tps están en edad de trabajar y el 19 por ciento trabaja en la construcción. además, sus contribuciones totales a los ingresos e impuestos alcanzaron los $ 8,8 mil millones en 2017.
el momento de la manifestación del martes agregó otro nivel de urgencia ya que el congreso y la administración enfrenta un plazo límite para alcanzar un acuerdo sobre el presupuesto del viernes a fin de evitar otro cierre del gobierno.
"la financiación del gobierno depende esencialmente de encontrar algún tipo de acuerdo para financiar la inmigración", dijo robbins.