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“Si no me ayudas, me mato”. Esta niña sufría un infierno en casa. Suplicó ayuda a un desconocido. Él le pidió un vídeo

"No puedo conseguir el vídeo", lloró la niña, a la que había conocido por Internet. Pero el hombre no le dejó otra opción. Cuando al fin se lo mandó, él manejó 800 millas y la secuestró.
/ Source: TELEMUNDO

La joven, de 14 años, comenzó a hablar con aquel desconocido a través de una web de juegos en Internet (Roblox) el día antes de Navidad. De ahí pasaron a la red social Facebook y a una aplicación de mensajería, en la que la niña le confesó que su padre abusaba sexualmente de ella.

“No puedo quedarme aquí”, escribió la joven, “si no me ayudas de alguna manera igual me mato como estaba planeando hacer”.

La niña se quejaba de que nadie la creía. Aquel desconocido le respondió que probablemente él tampoco la iba a creer… a menos que le mostrara un vídeo probando sus acusaciones.

“Odio decir esto, pero no puedo arriesgarme a meterme en problemas por ti”, le dijo el hombre, “si puedes conseguir ese vídeo, puedo sacarte de ahí, pero sin él tú terminarás de nuevo con él y yo me meteré en problemas”. “Ha estado abusando de ti desde los 12 años”, añadió, “si eso no es razón suficiente para conseguir el vídeo, no sé qué más contarte”.

El hombre, que se llama Bryan Rogers, tiene 31 años y vive en Madison (Wisconsin), le dio instrucciones a la niña (cuya identidad no ha sido desvelada para protegerla) sobre cómo esconder su teléfono en la habitación para grabar la siguiente violación, según informa el diario Knox News.

“No puedo conseguir el vídeo”, respondió la niña, “sencillamente no puedo”. “¿Así que yo soy un [palabra malsonante] por no arriesgarme a ir a prisión por una persona a la que ni siquiera conozco?”, le replicó el hombre.

La niña consiguió el vídeo, y se lo envió por correo electrónico el 10 de enero. Cuatro días después, huyó por la ventana de su habitación en Madisonville, un pueblito de Tennessee, según denunciaron sus padres.
Rogers ha reconocido que manejó 800 millas hasta la casa de la niña, y se la llevó de vuelta a la vivienda que el hombre comparte con su madre en Wisconsin, usando carreteras secundarias y conduciendo por la noche, sin detenerse en gasolineras para no ser grabado por cámaras de seguridad.

Agentes del FBI llegaron a su casa el pasado jueves, siguiendo una pista y pruebas digitales, y encontraron a la niña escondida en un armario, asustada pero “bien”, según el sheriff del condado de Monroe (Wisconsin), Tommy Jones.

Los agentes le preguntaron al hombre por qué no había enviado el vídeo a la policía, y él respondió que creía que no aguantaría ante un juez. Ahora está detenido, acusado de explotación sexual y secuestro. Pero el vídeo ha servido para detener al padre de la niña, Randall Lee Pruitt, de 41 años, acusado de violación.