En una entrevista con el diario Los Angeles Times el jefe de gabinete del Gobierno, John Kelly, quien dejará el cargo la próxima semana, dijo que el presidente, Donald Trump, había abandonado desde hace mucho la idea de construir un muro de concreto de 10 pies de altura en la frontera con México.
La demanda de Trump de recibir financiamiento para su muro a cambio de aprobar la ley de presupuesto ha llevado al Gobierno a un cierre parcial e indefinido por falta de fondos. Hasta hace unos días el presidente exigía al menos 5.000 millones de dólares para construir la barrera.
Sin embargo, John Kelly, quien dejará su puesto en la administración este jueves después de ocuparlo por 17 meses, dijo a Los Angeles Times que Trump había abandonado la noción “de un muro sólido de concreto desde comienzos de la administración”.
En su lugar, dijo el general retirado, Trump tenía en mente la colocación de una mezcla de medidas tecnológicas con barreras de acero, a lo largo de la frontera. Un cambio de opinión que Kelly atribuyó a las pláticas que el presidente sostuvo con oficiales encargados de la seguridad en la frontera.
Kelly también dijo que la separación de familias, producto de la política de cero tolerancia, había sido originalmente una idea del ex fiscal general Jeff Sessions. Aseguró además, que el plan de Sessions los había tomado por sorpresa.
Aunque Kelly defendió su papel dentro del Gobierno, dijo que la mejor forma de medirlo sería quizá por lo que no hizo Trump cuando estuvo a su lado, más que por las acciones positivas.
Kelly renunció a su posición después de que Trump anunciara el retiro inminente de las tropas en Siria y parte de las que están en Afganistán.