El presidente, Donald Trump, ha acusado esta tarde al Partido Demócrata y a la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de obstruir la construcción de un muro en la frontera con México, una de sus principales promesas de campaña y la razón por la cual el Congreso no ha logrado llegar a un acuerdo para financiar parte del Gobierno.
Como resultado, más de medio millón de funcionarios públicos se encuentran paralizados o trabajando sin recibir pago alguno por ahora. Trump ha dicho que no cejará en la construcción del muro y ha instruido a sus correligionarios del Partido Republicano a no aceptar un presupuesto público que no contemple fondos suficientes para ese proyecto.
“La razón por la cual el trato de dar DACA (el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia) a cambio del muro no se hizo fue por la ridícula decisión del 9° Circuito de permitir que DACA permaneciera, lo que dio pie a que el caso llegara a la Suprema Corte. Tras el fallo, los demócratas se retiraron del trato –y ahí es donde estamos hoy, obstrucción demócrata del muy necesitado muro”.
El presidente se refirió a un programa que permite la permanencia legal en el país de alrededor de 800.000 jóvenes inmigrantes que ingresaron o permanecieron en el país de manera irregular cuando eran menores de 16 años. Trump ha intentado terminar con la protección que su predecesor, el ex presidente Barack Obama, otorgó a estos jóvenes mediante el decreto del programa DACA.
Muchos conservadores en el Partido Republicano, incluyendo al presidente, han considerado que Obama excedió su poder al firmar el decreto que beneficia a los jóvenes inmigrantes. Pero no será hasta la próxima primavera que la Suprema Corte revisará la constitucionalidad de la medida de Obama.
En algún momento Trump había coqueteado con la posibilidad de garantizar el programa DACA mediante un voto de los legisladores republicanos a cambio de recibir financiamiento para su ansiado muro fronterizo. Sin embargo, los líderes demócratas nunca acordaron llevar a cabo el trato y han dicho sin reparos que consideran el muro una afrenta al “sentido común”.
La decisión de Trump de no ceder en el muro y la respuesta negativa de los demócratas de otorgarle los 5.000 millones de dólares que ha exigido para construirlo condujeron al Gobierno a un callejón sin salida, en el que una porción considerable de éste se ha quedado sin financiamiento para operar.
Tras el anuncio este jueves de que no habría votación para acordar un presupuesto, el Gobierno se mantendrá parcialmente cerrado hasta el próximo año. Y más de 600.000 servidores públicos no recibirán un cheque después de las fiestas decembrinas y de fin de año.