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¿Podrían María y José refugiarse en Estados Unidos si huyeran del rey Herodes para salvar al niño Jesús?

Sí, afirma bajo juramento la Casa Blanca. Pero esconde datos vitales que lo hacen muy difícil de creer. El niño Jesús no habría crecido en Estados Unidos sino en México. O habría sido asesinado. Le explicamos por qué.
Imagen de archivo de una Natividad.
Imagen de archivo de una Natividad. AP / AP

“Si María y José estuvieran intentando venir a Estados Unidos bajo la situación que existía y el rey Herodes estuviera intentando matar a todo el mundo menor de dos años, ¿serían elegibles para recibir asilo en Estados Unidos?”.

El congresista republicano Louie Gohmert le hizo esta pregunta hoy a la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, durante una comparecencia sobre el trato que las autoridades migratorias dispensan a los indocumentados que llegan a la frontera sur. 

“Sí”, respondió Nielsen bajo juramento.
Sin embargo, las afirmaciones anteriores de Nielsen y la política del Departamento de Seguridad Nacional ponen en duda esa afirmación.

Pero primero, un poco de historia bíblica.

El nacimiento de Jesús aparece recogido en dos Evangelios. El de San Mateo explica que María estaba comprometida con José pero, antes de vivir juntos, tuvo un hijo “por obra del Espíritu Santo”. José quiso abandonarla en secreto, pero un ángel se le apareció en sueños para darle explicaciones. Así que José “llevó a María a su casa”, y ella dio a luz a un hijo al que él puso el nombre de Jesús.

Vivían entonces en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, que al enterarse del nacimiento por boca de “unos magos de Oriente”, decidió enviar a éstos a Belén a buscar al niño. Los magos lo encontraron, le llevaron regalos, pero luego “volvieron a su tierra por otro camino” en vez de avisar a Herodes. Al enterarse, el rey mandó matar en Belén y sus alrededores a todos los niños menores de dos años. Pero José ya había recibido una advertencia del ángel para que huyera a Egipto, y allí se fueron los tres, y allí permanecieron hasta la muerte de Herodes. Luego regresaron, pero no a Belén, porque aún tenían miedo, sino a Nazaret.

El Evangelio de San Lucas, en cambio, relata que José acudió de Nazaret a Belén para apuntarse al censo de esa ciudad, porque así lo había ordenado el emperador romano Augusto. Mientras estaban allí, a María “le llegó el tiempo de ser madre” y dio a luz a su primogénito, al que “acostó en un pesebre porque no había lugar para ellos en un albergue”.

¿Qué hubiera pasado si María y José hubieran llegado a la frontera estadounidense huyendo de Herodes?

Como inmigrantes indocumentados, hubieran tenido que decidir si cruzan ilegalmente o se presentan ante un puerto de entrada a pedir asilo. Si optan por la primera opción, podrían intentar evitar a las autoridades migratorias y hacer vida de forma ilegal en el país, arriesgándose cada día a que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) les atrape, y sin acceso a derechos básicos.

Si ICE les hubiera agarrado, les habría enviado de vuelta a la tierra de Herodes, donde Jesús habría sido ejecutado. ¿Podrían haber pedido asilo antes? Por ahora, sí, pero sólo porque un juez ha anulado temporalmente la orden ejecutiva del presidente, Donald Trump, que quiere negar a esa posibilidad a quienes crucen ilegalmente la frontera.

Si hubieran decidido entregarse a las autoridades migratorias, habrían tenido que pasar la prueba de miedo creíble. Lo mismo hubiera ocurrido si hubieran ido directamente a un puerto de entrada a pedir asilo, pero en ese caso habrían tenido que esperar días, semanas o meses a que llegara su turno, con un número escrito en su muñeca para saber su puesto en la lista de espera.

En la prueba de miedo creíble, los inmigrantes deben demostrar que temen por su vida si regresan a su país de origen porque allí son perseguidos por su raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas o pertenencia a un grupo social determinado. Aproximadamente nueve de cada 10 inmigrantes que lo intentan consiguen pasar esta prueba. Queda por ver si ser perseguido por ser “el rey de los judío” cualifica dentro de los criterios para solicitar asilo.

Los inmigrantes que pasan la prueba de miedo creíble obtienen derecho a plantear su caso ante una corte de inmigración; entre tanto, algunos quedan en libertad, mientras que otros son encarcelados. Los centros de detención de las autoridades migratorias están en cuestión después de que una niña muriera y otra está al borde de la muerte tras pasar por estas instalaciones. Jesús, recién nacido, no lo habría tenido fácil tras ser detenido.

Además, durante meses el Gobierno de Trump separó a los niños de sus padres en la frontera, por lo que José y María podrían haber sido encarcelados e incluso deportados, mientras Jesús quedaba bajo custodia federal o incluso era entregado en adopción sin el conocimiento de sus padres.

Pero incluso en el mejor de los casos, pasando la prueba de miedo creíble, quedando en libertad y evitando la enfermedad, la muerte o la separación familiar bajo custodia federal, María y José y Jesús no habrían podido quedarse en Estados Unidos, sino que habrían sido devueltos a México a esperar, probablemente durante años, la resolución de su petición de asilo. Feliz Navidad.