IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

ICE dijo que esta inmigrante murió por enfermedad. Pero antes fue brutalmente apaleada

Huyó de la MS-13 para no ser "cortada en pedacitos". Fue arrestada por la Migra tras llegar en caravana. Una autopsia muestra ahora que recibió puñetazos, patadas y golpazos cuando estaba bajo custodia de ICE.
Roxana Hernández, de 33 años, inmigrante fallecida bajo custodia de ICE.
Roxana Hernández, de 33 años, inmigrante fallecida bajo custodia de ICE.  Diversidad Sin Fronteras / Diversidad Sin Fronteras

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) informó de que Roxsana Hernández había sido hospitalizada el 17 de mayo con síntomas de neumonía y otras complicaciones asociadas al HIV, y había muerto el 25 de mayo de un paro cardiaco. Lo que no mencionó en su comunicado es que, antes, Hernández había recibido brutales malos tratos, según ha confirmado una autopsia reportada este martes por el diario The Washington Post.

Hernández, de 33 años, había llegado a la frontera californiana el 9 de mayo para solicitar asilo. Ya antes, en tres ocasiones, había entrado ilegalmente en el país, y tenía antecedentes criminales por robo y prostitución. Era hondureña, pero vez que los agentes de Inmigración la detenían, reclamaba ser mexicana para ser deportada a ese país.

En Honduras había sido violada por un grupo de pandilleros de la MS-13, que le contagiaron el HIV, según relató a la web Buzzfeed.  “Los transexuales en mi barrio son asesinados y cortados en pedacitos, los tiran dentro de bolsas de papas fritas”, relató. Cuatro meses después de este incidente, se unió a una caravana de emigrantes para escapar hacia el norte.  En México, las pandillas siguieron amenazándola, de forma que continuó su camino hacia Estados Unidos.

Hernández pidió asilo tras llegar al puerto de entrada en San Diego, y fue detenida el 13 de mayo y encerrada en una hielera (celdas bautizadas así por los indocumentados por sus bajas temperaturas). Menos de dos semanas después estaba muerta. Según la organización Pueblo Sin Fronteras, no se le proporcionó asistencia médica ni comida adecuada.  “Roxy murió por una negligencia médica de las autoridades migratorias”, denunció esa organización.

Una autopsia ha concluido sin embargo que Hernández “sufrió ataques y abusos físicos bajo custodia” de ICE: su cuerpo tenía signos de patadas, puñetazos y golpes con objetos, según el informe, incluido en una demanda judicial interpuesta por la organización Transgender Law Center. Se denuncia además que, según testigos, no recibió ayuda médica pese a estar “gravemente enferma” y pasar días con vómitos y diarrea.

ICE ha señalado que los exámenes médicos realizados tras su muerte indicaron que “sufría un historial de HIV sin tratar”, y que los médicos que la trataron una vez hospitalizada no denunciaron sospechas de abusos físicos, según The Washington Post.