La Casa Blanca ha aliviado algunos de los límites impuestos a la investigación del FBI en su investigación sobre las acusaciones de mala conducta sexual contra Brett Kavanaugh, nominado al Tribunal Supremo, y la ha dado permiso para entrevistar a cualquier persona que considere, según ha confirmado un alto funcionario estadounidense y otra fuente relacionada con el caso a NBC News.
Este movimiento de la Casa Blanca se produce después de que el presidente Donald Trump haya hecho una serie de declaraciones engañosas en las que sugirió que el FBI podía hablar libremente con cualquier testigo cuando, según informó NBC News el sábado, se impusieron restricciones significativas al FBI. La agencia ahora puede ampliar su investigación, siempre que la revisión esté terminada para el final de la semana, según informó en primer lugar The New York Times.
"Quiero que entrevisten a quien consideren apropiado, a su discreción", dijo Trump en un tuit en respuesta a un informe de NBC News que cita a varias personas familiarizadas con el proceso que dijeron que la Casa Blanca estaba limitando el alcance de la investigación.
Después de consultar con los republicanos del Senado, la Casa Blanca ordenó al FBI que entrevistara a solo cuatro personas: los amigos de Kavanaugh, Mark Judge y P.J. Smyth; la acusadora Deborah Ramirez, quien dice que Kavanaugh la agredió mientras ambos estudiaban en Yale; y Leland Keyser, una amiga de Christine Blasey Ford, que acusó a Kavanaugh de agredirla sexualmente cuando tenía 15 años.
El abogado de Smyth dijo a NBC News el lunes que "respondió sinceramente a todas las preguntas que le hizo el FBI y, de acuerdo con la información que proporcionó previamente al Comité Judicial del Senado, indicó que no tiene conocimiento de la pequeña fiesta o reunión descrita por la Dra. Christine Blasey Ford y que tampoco tiene conocimiento de las acusaciones de conducta inapropiada que ha dirigido contra Brett Kavanaugh ". NBC News también confirmó que el FBI ha hablado con Judge y Ramírez.
Pero hasta el lunes, el FBI tenía prohibido dar pasos básicos en la investigación y de dar seguimiento a posibles testigos que corroboren las acusaciones.
No se permitió a la agencia entrevistar a Julie Swetnick, quien acusó a Kavanaugh de conducta sexual inapropiada en fiestas que se celebraron mientras era estudiante en la Preparatoria Georgetown en la década de 1980.
Aún no está claro si el FBI bajo esta nueva guía entrevistará a los ex compañeros de clase que han contradicho el relato de Kavanaugh sobre su consumo de alcohol en la universidad describiéndolo como un bebedor frecuente. Tampoco está claro si los agentes tratarán de determinar si Kavanaugh mintió al Senado sobre las referencias en su anuario que muchos creen que eran sexuales.