Texas no usará fondos estatales para educar a los menores inmigrantes que están en detención federal, lo que perjudicaría a los niños y pone en peligro las colaboraciones con distritos escolares cercanos a la frontera con México.
La Agencia de Educación de Texas le dijo a un grupo de escuelas independientes que los institutos locales que quieran servir a los estudiantes migrantes bajo custodia federal no pueden hacerlo con fondos estatales, de acuerdo con una carta obtenida por el diario Houston Chronicle.
Según reporta la agencia de noticias AP, este mes funcionarios escolares de San Benito, Texas, se pusieron en contacto con un centro de detención de migrantes y acordaron enviarle 19 maestros bilingües y otros recursos.
El distrito escolar esperaba recibir 3 millones de dólares adicionales en fondos estatales al incluir a los estudiantes detenidos en la lista de matriculados, pero el operador privado del albergue, Southwest Key, canceló el acuerdo.
Ahora todos los maestros tendrán que irse, dijo Salvador Cavazos, vicepresidente de servicios de educación en el grupo sin fines de lucro.
"Pienso que al final los afectados adversamente son los menores que están en los albergues. Porque estamos en una asociación, hubiéramos podido proveer recursos adicionales, colaborar con instituciones de crédito, proveer calificaciones y ayudarles a recibir créditos para acudir a otras escuelas públicas”, dijo citado diario.
La ola de menores que ha llegado a Estados Unidos a través de la frontera sur ha generado preguntas sobre el rol que deben tener los estados en su educación. En una declaración, los funcionarios de Texas dijeron que es responsabilidad del gobierno federal.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) requiere que todos los niños en edad escolar en los albergues de detención sean evaluados dentro de los tres días de su llegada para determinar sus necesidades educativas, que reciban seis horas de instrucción estructurada entre semana y servicios especiales de educación si son elegibles.