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Medidas económicas de Maduro generan incertidumbre mientras analistas advierten que aumentarán la inflación

La oposición ha llamado a un paro nacional en respuesta a las medidas que analistas aseguran crearán más inflación.

Numerosos comercios cerrados, compradores nerviosos en los supermercados y algunas estaciones de gasolina con largas filas se observaron este fin de semana en algunos puntos de la capital venezolana tras el anuncio el viernes de las nuevas medidas económicas del gobierno de Nicolás Maduro que han generado incertidumbre entre la población. La oposición ha llamado a un paro nacional en respuesta a las medidas que analistas aseguran crearán más inflación.

Este lunes, que además el gobierno declaró feriado, entra en vigor la reconversión monetaria que implica la eliminación de cinco ceros al bolívar para presuntamente combatir la inflación, bajo la nueva moneda que se conocerá como ‘bolívar soberano’. El gobierno tomó una iniciativa parecida en 2008 quitándole tres ceros al antiguo bolívar llamándolo ‘bolívar fuerte’, que no alivió la inflación. 

Maduro anunció también el aumento del 3.300% del salario mínimo, que pasó a ser de 1.800 bolívares soberanos (unos 30 dólares) precisando que el nuevo ingreso equivaldrá a medio petro, la criptomoneda venezolana creada por el estado que no cuenta con credibilidad internacional ni liquidez en mercados de criptomonedas. En junio se aprobó un ajuste de 103% que llevó el sueldo mínimo a 5,19 millones de bolívares (equivalentes a 51,9 bolívares soberanos).

Para muchos empresarios y pequeños comerciantes queda en duda cómo pagarán estos sueldos. El carnicero Jesús Pacheco entrevistado por la agencia de noticias AP dice que podría verse obligado a despedir a algunos de sus seis empleados solo para mantenerse en el negocio debido al repentino salto en el salario mínimo.

El paquete de reformas también incluye el aumento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del actual 12% al 16%. Maduro también dijo recientemente que se llevará a precios internacionales el valor de la gasolina, que se vende a menos de un centavo de dólar el litro y es la más barata de mundo.

Maduro adelantó que su gobierno va a establecer “un solo de tipo de cambio fluctuante” que estará anclado al petro, pero no precisó cuándo entraría en vigencia. En el país suramericano operan dos tasas: una para las subastas de divisas oficiales y otra para las remesas que están por debajo del tipo de cambio del mercado negro.

Al hablar sobre el precio de la criptomoneda, Maduro dijo que un petro tendrá un valor en dólares equivalente a un “monto oscilante de 60 dólares o más”, que es el precio del barril de petróleo, y agregó que cada petro valdrá “3.600 bolívares (soberanos)”. La tasa oficial del mecanismo de subasta, conocido como Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario Flotante de Mercado (Dicom), está en 248.832 bolívares por dólar.

Los economistas dicen que es probable que las medidas de Maduro aceleren la hiperinflación en lugar de abordar los problemas económicos centrales, como la caída de la producción de petróleo.

En julio se reportó en Venezuela una inflación anualizada de 82.766%, de acuerdo con cálculos de los congresistas opositores. El Fondo Monetario Internacional indicó que la inflación podría saltar en Venezuela a 1.000.000% al cierre del año, una tasa récord en la región que llevaría el país petrolero a una situación similar a la que enfrentaron Alemania en 1923 y Zimbabue en 2008.

La oposición venezolana, en particular dos de los principales partidos opositores Primero Justicia y Voluntad Popular, convocó el sábado a un paro nacional para el martes 21 de agosto, un día después de la entrada en vigor de las medidas, en protesta por las medidas económicas que anunció el presidente Maduro.

“Fueron un grupo de medidas desordenadas, irracionales, contradictorias”, afirmó el sábado el segundo vicepresidente de la Asamblea Nacional y dirigente de Primero Justicia, Alfonso Marquina, al rechazar el plan.  

Marquina dijo a la prensa que las medidas acordadas por el mandatario son “inviables” y generarán el “cierre masivo de empresas y con ello mayor desempleo”, en medio de una severa recesión que viene enfrentando el país desde hace más de tres años.

Por su parte, María Corina Machado, líder opositora y coordinadora del partido Vente Venezuela, rechazó el paquete de medidas llamando a la “desobediencia”. Sostuvo que el gobierno está agonizando, pero desea mantener el poder “al costo que sea” en un audio difundido en sus redes sociales.

“Maduro quiere acabar con nosotros”, aseguró Machado. “Quiere provocar un éxodo más brutal, por eso lo ocurrido anoche acelera el desenlace. O ellos se quedan y nos exterminan o nosotros los sacamos y construimos un país prospero para los venezolanos”.

La comunidad internacional también ha repudiado las medidas de Maduro. El reconocido economista de la Universidad Johns Hopkins Steve Hanke compara los cambios con una “cirugía facial superficial” en la revista Forbes y advierte que la hiperinflación incrementará.