Más de cien casos de sarampión se han reportado este año en 21 estados del país incluyendo Nueva York, Texas y Washington, entre otros, de acuerdo a un informe ofrecido este miércoles por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Los bebés que no reciben la vacuna son especialmente vulnerables a las complicaciones del sarampión, por lo que se recomienda que los menores estén al día con todas sus vacunas.
Este malestar produce inflamación, fiebre, dolor de cabeza, fatiga y pérdida de apetito. La persona podría estar bajo tratamiento durante dos semanas, tiempo en el que desaparece la enfemedad.
Según los datos recopilados por el CDC, en 2017 se reportaron 118 casos en 15 estados, incluyendo el Distrito de Columbia; en 2016 hubo 86 casos en 19 estados y en 2015 la cifra alcanzó los 188 afectados en 24 estados.
La mayoría de las personas que contrajo el virus no había recibido la vacuna que lo previene, de acuerdo con el CDC.