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Las claves del segundo debate presidencial en México

Los candidatos volverán a verse las cara y por primera vez será el público el encargado de examinar las propuestas y postular las dudas de la ciudadanía. Serán 42 ciudadanos quienes harán las preguntas a los cuatro candidatos restantes
El candidato puntero Andrés Manuel López Obrador, este 7 de mayo en la Ciudad de México.
El candidato puntero Andrés Manuel López Obrador, este 7 de mayo en la Ciudad de México.AP / AP

Los candidatos volverán a verse las caras y cruzar propuestas este domingo durante el segundo debate presidencial que se llevará a cabo esta noche en la ciudad de Tijuana a las 9:30 p.m. hora del centro de México (10:30 p.m. hora del este, 7 p.m. del oeste).

Según la más reciente encuesta de la consultora Mitovsky publicada este mes, Andrés Manuel López Obrador de la coalición Juntos Haremos Historia encabeza la intención de voto con 44.5% de la preferencia “efectiva” (descontando a los votantes no declarados, seguido de Ricardo Anaya, de la coalición Por México al Frente con 20.5%, José Antonio Meade de la coalición Todos por México con 19.8% y el candidato independiente Jaime Rodríguez, “El Bronco”, con 4%.

Para esta ocasión los ciudadanos indecisos estarán al centro del debate, y no sólo en el intento por adquirir sus votos, sino que en un nuevo formato serán ellos quienes cuestionen a los candidatos.

Un nuevo formato enfocado en los indecisos

En esta ocasión los cuatro candidatos recibirán preguntas de 42 electores que no han escogido aún por quién votarán y no cuentan con militancia partidista. En un formato similar al que se ha empleado en debates en los Estados Unidos, ellos serán los encargados de examinar las propuestas y postular las dudas de la ciudadanía, mientras que los candidatos podrán dejar sus atriles y dirigirse al pública de forma más dinámica.

Se busca que esta innovación y el rol desempeñado por el público presente permita contribuir a definir el voto de los indecisos de cara a la votación de 1 de julio, aprovechando el alto interés mostrado por la ciudadanía en el primer debate.

El primer debate presidencial tuvo una audiencia record de más de 11 millones de personas, o 40% de los televidentes, según el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE).

Según la más reciente encuesta publicada este mes por la encuestadora Mitofsky, 26.8% de los encuestados no declararon preferencia alguna. Según Berumen y Asociados estima que 15.6% es muy probable que cambie su voto.

El abandono de Margarita Zavala

Desde el primer debate uno de los candidatos ha abandonado la carrera por la presidencia: la candidata independiente Margarita Zavala, la única mujer en la contienda, anunció este miércoles que se retiraba “por un principio de congruencia, por un principio de honestidad política”.

De acuerdo con Mitovsky, Zavala estaba en el último lugar de la intención de voto, con 3.7% de la preferencia “efectiva”. De inmediato recibió invitaciones a sumarse a las campañas de José Antonio Meade, o de volver al Partido Acción Nacional  (PAN), del cual era miembro previo a ser independiente, para unirse a la campaña de Ricardo Anaya. Por su parte El Bronco dijo que Zavala no era una verdadera independiente, arguyendo que él sí representaba esta alternativa y por eso sus votante debían de optar por él. Andrés Manuel López Obrador, líder en las encuestas, dio por sentado que esos votos le corresponderían.

La cobertura de los candidatos en medios hasta ahora

De cara a su encuentro con el público durante el debate, la consultora Integralia analizó en su quinto reporte electoral la cobertura en radio y televisión de cada uno de los candidatos, en cantidad y la valoración que se hace de ellos. Esta es la oportunidad para los candidatos de dirigirse directamente al público, sin el intermediario de los medios.

Según el reporte, el candidato que más porcentaje obtuvo de la cobertura en medios fue López Obrador, con 24.86%. Sin embargo, de esa cobertura, el 36 % fue calificada de negativas, por 31.4% de positiva, además de la cobertura que puede considerarse neutra. Es el candidato cuya cobertura estuvo más polarizada.

José Antonio Meade fue el segundo candidato que mayor cobertura obtuvo, con 23.26%, de cual 20.7% fue considerada positiva y 16% negativa. Le siguió Ricardo Anaya con el 22.05% de la cobertura, 25.2% de ella positiva por 13% que no le era favorable.

El Bronco fue el candidato con mayor percepción negativa respecto a la positiva, con 20.9% en su contra y 14% a su favor, durante un tiempo de cobertura que correspondió al 13.18%.