Un agente murió y otros cuatro resultaron heridos tras ser atacados a tiros por un sospechoso cuando respondían a una llamada de emergencia en una ciudad a las afueras de Denver, en Colorado.
La Oficina del Sheriff del Condado Douglas informó a través de su cuenta de Twitter, que en el tiroteo dos civiles fueron heridos por el sospechoso, quien se cree estaría muerto.
El suceso se produjo la madrugada del domingo, cuando varios agentes de la oficina del sheriff acudieron a un edificio de apartamentos en la localidad de Highlands Ranch para responder a una llamada que denunciaba una "disputa doméstica", según un tuit de la misma fuente.
"Durante la investigación, hubo disparos y múltiples agentes resultaron heridos. No hay información sobre el estado de los agentes ni sobre posibles heridas a civiles", señaló la oficina del sheriff.
El presidente Donald Trump envió en un tuit sus "más profundas condolencias a las víctimas del terrible tiroteo en el condado de Douglas" y "a sus familias".
"Amamos a nuestra policía y a nuestros agentes de aplicación de la ley. ¡Que Dios los bendiga a todos!", añadió Trump.
La oficina del sheriff había emitido una alerta roja que instruía a los habitantes de un perímetro señalado de Highlands Ranch a "quedarse donde están, evitar las ventanas y mantenerse alejados de los muros exteriores".
Además, se estableció un refugio de emergencia para acoger a los ciudadanos de esa localidad de casi 100.000 habitantes que pudieran haberse quedado fuera de su hogar debido al tiroteo.