Ciudad de México.- El sismo que sacudió México hace una semana ha provocado un espontáneo brote de solidaridad en la sociedad mexicana, y ha renovado el imaginario del heroísmo nacional. Entre las muchas postales que circularon en redes sociales en los últimos días, la de Eduardo Zárate Vargas se ha destacado del resto por lo poderoso de su imagen.
La fotografía muestra a este joven michoacano cargando un costal en su espalda mientras ayuda a remover escombro entre las ruinas de uno de los derrumbes de la capital; la imagen sería idéntica a muchas otras que se han captado salvo por una cosa: Eduardo está montado en su silla de ruedas porque no puede caminar.
Según reporta el diario Excélsior, Edy, como lo conocen sus familiares, se encontraba originalmente a Zinapécuaro, Michoacán, cuando se enteró que su amigo Fernando se encontraba atrapado entre las ruinas de una construcción en la colonia Del Valle. Resuelto a ayudar, el joven improvisó una colecta de víveres junto con unos amigos y entonces se dirigió hasta la capital para ayudar a encontrar a su amigo.
El joven se enlistó como voluntario con los miembros de Protección Civil y trabajó durante todo un día apoyando las labores de rescate; luego de descansar algunas horas, se reincorporó al trabajo y por fin recibió el fruto de su esfuerzo cuando vio a su amigo con vida.
En entrevista con el medio, Eduardo señala que tanto en él como en los jóvenes de Michoacán las ganas de seguir ayudando siguen activas y dispuestas.
“Veo una juventud que impone, que está rompiendo paradigmas […] somos una nueva generación nueva, somos el presente del país y estamos trabajando todos en equipo por lograr la reconstrucción del país”, declaró,
La labor de Eduardo le ganó una diversidad de mensajes en redes sociales en los que los usuarios reconocieron su disposición para ayudar y se declararon orgullosos de tener un compatriota como él.