La Agencia Espacial Europea inició el lunes la primera etapa de una misión en dos partes para explorar Marte y buscar signos de vida en el planeta rojo.
La sonda no tripulada ExoMars, construida en colaboración con agencia rusa Roscosmos, despegó el lunes en un cohete ruso, y se espera llegue a Marte en octubre.
La sonda incluye una nave que orbitará en torno al planeta analizando gases en la atmósfera de Marte y un pequeño módulo que aterrizará en la superficie y pondrá un vehículo en el suelo de Marte en 2018.
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La sonda europea Beagle 2 desapareció durante el proceso de aterrizaje en 2003, un revés que la ESA quiere evitar en esta ocasión.
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Las trazas de metano ya descubiertas en la atmósfera marciana indican actividad geológica o incluso biológica reciente en Marte, indicó Paolo Ferri, director de operaciones de misión de ESA.