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Señales de vida en restos de edificio tras sismo en Taiwán

Los socorristas han retirado por lo menos a 247 sobrevivientes de los restos de un edificio que se derrumbó

TAINAN, Taiwán (AP) — Los socorristas detectaron el domingo señales de vida entre los escombros de un edificio residencial que se derrumbó durante un poderoso sismo de poca profundidad en el sur de Taiwán, donde causó al menos 18 muertos y centenares de heridos.

El centro de emergencias en Tainan, la ciudad más afectada por el temblor, consideró que 132 personas continuaban desaparecidas más de 24 horas después del terremoto de magnitud 6,4 que sacudió la región el sábado al amanecer.

El alcalde de Tainan, Lai Ching-te, dijo en entrevistas televisivas desde el lugar del derrumbe del edificio que mediante equipo especial se detectaron señales de vida de al menos 29 personas atrapadas.

Los socorristas han retirado por lo menos a 247 sobrevivientes de los restos del edificio. Estas personas figuran entre las más de 340 que fueron rescatadas en Tainan, donde otros nueve inmuebles se vinieron abajo y cinco quedaron inclinados, señaló el gobierno de la ciudad.

La Agencia Noticiosa Central de Taiwán reportó que 484 personas resultaron lesionadas, aunque la mayoría fue dada de alta de los hospitales el sábado en la noche.

La espectacular caída del edificio de 17 niveles suscitó de inmediato dudas sobre su construcción, y el ministro del interior de Taiwán informó que habrá una investigación.

El socorrista Jian Zhengshun dijo que las labores de rescate eran difíciles porque se cree que parte del edificio se hundió al reblandecerse la tierra por el temblor. Añadió que los socorristas tuvieron que retirar escombros para crear pasadizos a fin de llegar hasta las personas atrapadas.

El temblor ocurrió dos días antes del inicio de las celebraciones del Año Nuevo Lunar, que es la fiesta familiar más importante en el calendario chino.

En el inmueble destruido vivían 256 residentes registrados, pero podría haber habido más gente cuando se vino abajo debido a un aumento del número de personas en el lugar porque las familias típicamente reciben huéspedes antes de la festividad.

La prensa local reportó que el edificio incluía un centro de atención para recién nacidos y madres, y que está confirmada la muerte de un bebé de 10 días de vida en el desastre.

El residente de Tainan, Lin Bao-gui, vendedor de vehículos usados y cuyas unidades quedaron aplastadas cuando el edificio cayó hasta el otro lado de la calle, dijo que su casa comenzó primero a "moverse horizontalmente, luego hacia arriba y hacia abajo, después una gran sacudida de derecha a izquierda".

"Permanecí en la cama pero salté de ella cuando escuché un gran estruendo, era el sonido del edificio que se derrumbaba", agregó.

Los operadores del tren de alta velocidad de Taiwán anunciaron el domingo que el servicio se reanudaría por completo a partir del mediodía.

El temblor dañó tendidos eléctricos cerca de la Estación de Tainan y causó interrupciones al sistema durante una hora de gran actividad, cuando muchas personas regresaban a su casa para celebrar el Año Nuevo Lunar.

La agencia informó que Madonna ofreció sus condolencias a las personas afectadas durante su actuación del sábado en la noche ante miles de admiradores en otra parte de la isla, en la capital Taipei, donde el sismo se sintió de manera prolongada y ondulatoria.

Debido al derrumbe del edificio residencial, surgieron las dudas en torno a si fue deficiente la construcción de la estructura que databa de 1989.

El gobierno de Tainán indicó que el inmueble no estaba catalogado como una estructura peligrosa antes del sismo, y que el ministro del interior, Chen Wi-zen, señaló que se investigará si la compañía constructora no incurrió en economía de costos.

Los temblores afectan con frecuencia a Taiwán, pero la mayoría son menores y causan poco o ningún daño. Sin embargo, 2.300 personas perdieron la vida en el terremoto de magnitud de 7,6 que azotó en 1999 el centro de Taiwán.


Yates de Estados Unidos participan en una competencia mientras turistas recorren el Malecón de La Habana en un convertible clásico el miércoles 3 de febrero de 2016. (Foto AP/Desmond Boylan)