IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Asesores papales sobre abusos analizan caso obispo chileno

Viajaron a Roma para expresar en persona sus preocupaciones ante la designación de un obispo chileno acusado de encubrir a abusador

CIUDAD DEL VATICANO (AP) — Cuatro miembros de la comisión que asesora al papa Francisco sobre abusos sexuales viajaron a Roma el domingo para expresar en persona sus preocupaciones ante la designación de un obispo chileno acusado de encubrir al abusador más conocido del país.

Marie Collins, miembro de la comisión, dijo que ella y otros tres integrantes se reunirán el domingo con el cardenal Sean O'Malley, de Boston, el lugarteniente del papa en materia de abusos sexuales, para expresarle sus recelos ante la designación de Juan Barros como obispo de Osorno.

Algunas víctimas del abusador, el reverendo Fernando Karadima, dicen que Barros estaba al tanto de los abusos e incluso presenció algunos de ellos varias décadas atrás cuando era protegido del carismático sacerdote, quien fue sancionado por el Vaticano en 2011 por abusar sexualmente de menores.

Collins dijo que si Barros no comprendió entonces que la conducta de Karadima era inaceptable, "entonces no comprende el abuso a los niños" y no debería estar al frente de una diócesis donde sería responsable de proteger a los niños de los pederastas.

Barros, antiguo capellán de las fuerzas armadas chilenas, ha enfrentado una oposición popular y eclesial sin precedentes desde que fue nombrado en enero. Más de 1.300 fieles de Osorno, junto con uso 30 sacerdotes diocesanos y 51 de los 120 legisladores nacionales chilenos, enviaron una carta al papa Francisco en que lo exhortaron a rescindir el nombramiento.

Barros ha negado haber algo indebido y ha insistido en que no conocía nada de los abusos sexuales hasta que se enteró en 2010 por reportes noticiosos. El Vaticano ha defendido el nombramiento alegando que no había "razones objetivas" para echarlo atrás.

Collins, que fue víctima de abusos, dice que las alegaciones de las víctimas de que Barros presenció actividades indebidas y no hizo nada —así como la oposición sin precedentes a su nombramiento— lo incapacita para el cargo y hace poco probable que pueda cumplir su labor de líder.

Una reciente reunión entre Barros y fieles molestos con su nombramiento fracasó cuando el obispo se presentó con dos guardaespaldas y perros policía, medidas de seguridad tomadas después que su ceremonia de consagración fue objeto de protestas violentas dentro de la catedral.