PARÍS (AP) — Las campanas doblaron, el transporte público parisino se detuvo y los niños se sentaron en silencio mientras Francia lloraba a los 12 muertos en un atentado contra la oficina de un periódico satírico que sacudió a la nación.
El presidente, François Hollande, ordenó que las banderas ondearan a media asta y convocó un minuto de silencio el jueves en memoria de las víctimas del ataque contra Charlie Hebdo, que había publicado caricaturas del profeta Mahoma. Los testigos dijeron que los atacantes dijeron pertenecer a al-Qaeda.
En la catedral de Notre Dame, la gente lloraba mientras escuchaba el tañido de las campanas. El rector de la mezquita de París pidió a todos los musulmanes que cumplieran el minuto de silencio y homenajearan a las víctimas de esta "violencia excepcional".
Hollande pidió a los franceses que se unieran contra el terrorismo y la intolerancia.