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Miami – El respaldo de los hispanos en Estados Unidos a la reelección de Barack Obama aumentó en junio tras el anuncio de una nueva política migratoria que beneficia a jóvenes indocumentados, reveló una nueva encuesta publicada hoy por NBC News, el periódico Wall Street Journal y la cadena Telemundo.
La orden ejecutiva del presidente, que inmediatamente detuvo la deportación de jóvenes indocumentados menores de 30 años que hayan llegado al país antes de los seis, incrementó la aceptación de Obama en seis puntos porcentuales.
De acuerdo a la encuesta, realizada entre el 20 y el 24 de junio, uno de cada diez hispanos (87 por ciento) dijo estar de acuerdo con esta decisión del presidente, un número mayor que el 68 por ciento del resto de la población.
Un 66 por ciento dijo apoyar al presidente comparado con un 26 por ciento al republicano Mitt Romney, una cifra mayor de votantes inscritos en comparación con el resto de la población que dijo apoyar al presidente en sólo un 47 por ciento frente a un 44 por ciento –el margen de error es de un 5.7 por ciento. Esto representa un incremento de un seis por ciento comparado con el mes de mayo cuando Obama recibió el respaldo del 61 por ciento de los hispanos y Mitt Romney sólo el 27 por ciento.
Pero el mayor reto de la administración es lograr incentivar a los latinos que, a pesar de ser el grupo de mayor crecimiento y quienes podrían ser la clave para la reelección de Obama, no están motivados a participar en estas elecciones.
Un 66 por ciento de los hispanos dijeron estar entusiasmados con estas elecciones, en comparación con un 80 por ciento de todos los adultos del país –esta cifra se mantiene invariable comparada con el 65 por ciento del mes anterior.
Esto es particularmente problemático para las posibilidades de reelección de Obama, considerando que los grupos que tienen mayor interés en participar en estas elecciones son votantes que votarían por Mitt Romney: seguidores del “Tea Party” (89 por ciento), inscritos que votaron por McCain (88 por ciento), conservadores (84 por ciento), adultos mayores de 65 años (83 por ciento) y blancos (81 por ciento).
A pesar de este obstáculo el 65 por ciento de los latinos aprueban el trabajo del presidente, lo que significa un incremento de cuatro puntos comparado con el mes anterior.