¿Recuerdas cuando les enseñaste a tus hijos cómo ir al baño por primera vez? Probablemente tú, tus hijos, e incluso yo lo hemos hecho de forma incorrecta desde pequeños.
La microbióloga alemana, Giulia Enders, sugiere que el inodoro puede ser perjudicial para tu intestino. Enders plantea que se debe utilizar el baño en cuclillas ya que cuando estamos de pie o sentados, el colon se enrosca y no es una buena posición para que el órgano se relaje y hagamos nuestras necesidades.
Enders dijo al periódico The Guardian que “alrededor del mundo 1.2 millones de personas, especialmente del oriente, que van al baño en cuclillas no tienen casi ninguna incidencia en diverticulosis y menos problemas con las hemorroides”.
La diverticulosis es la formación de pequeñas bolsas (divertículos) que se forman en la pared del intestino, y que según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, más de la mitad de estadounidenses mayores de 60 años la padecen.
El Daily Mail cita al doctor Joseph Mercola, quien afirma en su página web que “los bebés instintivamente se ponen en cuclillas para defecar, y también la mayoría de la población mundial”.
El remedio, mientras se diseña un modelo alternativo al sanitario tradicional, es que pongas tus pies en un banquito e inclines tu cuerpo hacia adelante cuando hagas popó, permitiendo así que evacúes el intestino con menor presión. Así también tu inodoro dejara de ser enemigo de tu intestino.
(imagen via YouTube/randomsillythings N)
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