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Obesidad infantil: 4 pasos simples para que tus hijos crezcan sanos y sin sobrepeso

Sigue estos pasos y ayuda a tus hijos a evitar la tendencia poco saludable de nuestra nación.

¿Sabías que un tercio de todos los niños en los Estados Unidos tienen sobrepeso o son obesos? ¿Y que el número de adolescentes obesos se ha triplicado a lo largo de las cuatro décadas anteriores? Sigue estas recomendaciones o pasos y ayuda a tus hijos a evitar esta tendencia nada saludable en nuestro país.

Paso 1: Aprende cuál es el índice de masa corporal (Body Mass Index, BMI) de tu hijo o hija. Solo necesitas saber su edad, género, altura y peso.

  • Para niños y adolescentes de 2 a 19 años, visita el calculador de BMI para niños del CDC  (Centro para el control de enfermedades)

  • Si el BMI de tu niño es superior al percentil 85 es probable que tenga sobrepeso.  Si el BMI es superior al percentil 95 se le podría considerar obeso. Habla con tu médico de familia sobre los próximos pasos a dar.

Paso 2: Es hora de hacer un cambio total de metabolismo: Convierte las preferencias por la comida no saludable en un plan de alimentación sensato.

  • Cambia tu enfoque mental. “Dieta” quiere decir reglas, exigencias y limitaciones. En lugar de enfocarte en lo que “no debes” o “no puedes” hacer, enfatiza lo que PUEDES hacer, como comer alimentos saludables y elevar tu nivel de actividad física.

  • Los cambios más sencillos cuentan. Solo dejar de comer una o dos galletas al día y agregar 60 minutos de tiempo de juego pueden producir cambios positivos.

  • Visita el sitio heart.org/simplecooking para consejos sobre alimentación saludable y recetas que le gustarán mucho a toda tu familia. 

Paso 3: Involucra a toda la familia. Cuando toda tu familia se compromete a hacer cambios saludables, aumentan tus posibilidades de ganar la batalla contra la obesidad infantil.

  • Varios estudios muestran que hay menos probabilidades de que los niños tengan sobrepeso cuando toda la familia comparte la mesa a la hora de comer. Además, es menos probable que sean obesos los niños que duermen lo suficiente y que limitan el tiempo frente al televisor a 2 horas al día.

  • Sirve de modelo de comportamiento sensato para tus hijos; ellos harán lo que te vean hacer. Aprende más acerca de cómo puedes ayudar a tu hijo a desarrollar hábitos saludables.

  • Practica lo que predicas. Aléjate de las galletas dulces y únete a tus hijos en sus juegos y actividad física.

  • Camina junto con tu familia después de la cena, pasa una hora jugando con tus hijos en un parque cercano, o acompáñalos a nadar en la piscina del vecindario.

Paso 4: ¡No le hagas difícil a tus hijos la toma de decisiones saludables!

  • Construye un ambiente saludable en tu hogar. Ten frutas y vegetales al alcance de la mano. Deja la comida basura en los anaqueles del supermercado.

  • El tema del peso puede ser delicado entre los niños y sus padres. No critiques sus hábitos de alimentación. En vez de hacerlo, edúcalos sobre las ventajas de conservar la salud. ¡No te olvides de alabarlos cuando hacen elecciones saludables!Ten presente estos consejos cuando vas a hacer las compras de alimentos o cuando planificas una vacación familiar! Pronto estos pasos pasarán a ser parte de tu rutina.

Para más información: